DAILY
RIESGO PAÍS (01/03/2021) | 1517 |
BOLDT. INFORMACIÓN SOCIETARIA – BOLDT – HR DESIGNACIÓN DE AUTORIDADES
https://aif2.cnv.gov.ar/Presentations/publicview/C06052A7-65E1-4756-98DD-079A0D1F5629
BOLDT. INFORMACIÓN SOCIETARIA – BOLDT – HR ASAMBLEA GENERAL ORDINARIA Y EXTRAORDINARIA 26.02.2021
https://aif2.cnv.gov.ar/Presentations/publicview/621DCF58-735C-4850-AF21-706467785FB0
B-GAMING SA. INFORMACIÓN SOCIETARIA – HR- DESIGNACIÓN Y RENUNCIA DE AUTORIDADES
https://aif2.cnv.gov.ar/Presentations/publicview/38C0B02D-5716-47CF-A229-83DEF774F6B9
BOLDT. INFORMACIÓN SOCIETARIA – FUSIÓN POR ABSORCIÓN DE TORRE PUERTO SANTA FE S.A Y AUMENTO DE CAPITAL
https://aif2.cnv.gov.ar/Presentations/publicview/37A47595-A436-4E90-B64E-3ACCAC96496C
BANCO PATAGONIA SA. INFORMACIÓN FINANCIERA – INFORME DE RESULTADO AL 31.12.20
https://aif2.cnv.gov.ar/Presentations/publicview/B0948BEB-F7BB-4B88-AD2A-7F2A54A6A15E
GENNEIA S.A.. INFORMACIÓN RELEVANTE RELATIVA A INSTRUMENTOS – AVISO DE PAGO COMPLEMENTARIO ON XXX
https://aif2.cnv.gov.ar/Presentations/publicview/55C7C356-A219-4B1B-9EC4-35FE837DD462
HECHOS RELEVANTES
CRESUD: Hoy finaliza la suscripción por plataforma de Nuevas Acciones Ordinarias. Y también finaliza el periodo de venta de cupones. El inversor que para las 12:00 PM no realizo la venta de cupones, BMB pasará a liquidarlos a precio de mercado.
Guía de Instrumentos en Pesos: CER+ TASA VARIABLE
Cinco meses después, con el balance actualizado al 15 de febrero, los títulos para poder intervenir sumaban $670.700 millones, unos USD 7.575 millones al tipo de cambio oficial o unos USD 4.422 millones según el contado con liqui, que es la paridad que rige en la operatoria en el mercado secundario. Esto implica una pérdida en el stock de los nuevos bonos del canje de un 24,1% (-USD 2.408 millones) según la cotización del dólar mayorista y de 26,1% (-USD 1.567 millones) según la paridad bursátil Esta contundente caída de los precios de los flamantes títulos públicos reestructurados se replicó también en el alza experimentada en el índice de riesgo país que mide JP Morgan, que trepó un 37%, de 1.101 a los 1.496 puntos básicos, entre el 10 de septiembre -cuando el referente incorporó los nuevos bonos con ley extranjera a la ponderación- y el 16 de febrero último. Claro que la intervención oficial no es la única razón del retroceso de las cotizaciones de los bonos soberanos. La debilidad de la macroeconomía argentina, las dudas sobre la sustentabilidad de las nuevas emisiones de deuda y el rojo fiscal, la escasez de reservas y la suba de la tasa de los bonos del Tesoro de los EEUU confluyen en paridades de “default”. Además del desplome de la valuación de los títulos públicos y el ascenso del riesgo país a niveles no vistos desde la reestructuración soberana cinco meses y medio atrás, la intervención oficial en la plaza de renta fija también tiene un elevado costo sobre las golpeadas reservas netas del Banco Central. “Al hacer un update del balance del efecto monetario y en reservas de la compraventa de AL30 del Banco Central se observa una absorción acumulada de base monetaria entre fines octubre y el 12 de febrero estimada en $100.000 millones -por venta de ese bono contra pesos- en números redondos. Y una estimación de venta de dólares de reservas netas en el mismo período -por compra de AL30D y AL30C en torno a los USD 650 millones”, precisó a Infobae el economista Federico Furiase, director de la consultora EcoGo. Con la compraventa de bonos el BCRA perdió reservas netas y el valor de su stock de deuda en el activo se hundió 24 por ciento De esta forma, los bonos en dólares del canje acumulan una pérdida promedio del 30% desde que fueron lanzados al mercado seis meses atrás, con un riesgo país de JP Morgan que superó la última semana los 1.500 puntos básicos , en el nivel más alto desde septiembre. Gabriel Caamaño, economista de la Consultora Ledesma, señaló a Infobae que “la intervención que hizo al principio la Anses y ahora sobre todo el Central, vendiendo y comprando, aporta más ruido todavía y deprime las cotizaciones en pesos y en dólares. De hecho, muchas veces el AL30 se desarbitra con el resto de los bonos de la curva por duration o se desarbitraba entre mercados y por eso tuvieron que salir una serie de restricciones para que los agentes -sobre todo las ALyCs- no salieran a aprovechar esos desarbitrajes”. “Las tasas de los principales títulos públicos en dólares se mantienen elevadas. Los rendimientos de los bonos globales muestran tasas de 16,6% anual en promedio, mientras que los títulos bajo Ley Argentina muestran retornos de 18,1% anual en promedio. Así la curva se sostiene con pendiente negativa”, precisó Research for Traders en un reporte.
(AMBITO) Dólar, inflación y consumo: ejes del discurso presidencial y qué piensa hacer el BCRA con las tasas.
Se viene el mensaje presidencial. Y como cada año, la lectura política y económica deberá navegar las profundas aguas de un año electoral. También ha dado su mensaje el Banco Central en las últimas horas. Inflación y dólar han merecido un abordaje, que habla de cómo serán los próximos meses en materia financiera y que se desarrollan en esta columna. De fondo subyace la pregunta sobre las herramientas que utilizará el Gobierno para tratar de frenar los precios: tipo de cambio, tasa de interés y tarifas podrían ser parte de la respuesta. Por último, no son menores otros registros: los DEG del FMI y la cotización de las materias primas. Atrás parecen haber quedado los durísimos días en que el Gobierno debió enfrentar las acusaciones por el vacunatorio vip, cuyo costo político todavía se mensura puertas adentro y que eyectó del Poder Ejecutivo a exministro Ginés González García. A favor, en los últimos días, se ubica la intención de la Casa Rosada de retomar la iniciativa saldando el acuerdo paritario con los gremios nacionales docentes y el anuncio de los bonos para los jubilados. La instancia institucional, el discurso del Presidente por la apertura de sesiones ordinarias, podrá entonces centrarse no sólo en los aciertos en el manejo de la pandemia, sino también en el diálogo social como herramienta y en las mejoras prometidas para los sectores de ingresos bajos y medios, algunas de ellas que serán apuntaladas con proyectos que serán enviados al Congreso, como el de Ganancias. En forma periférica, se podrá echar mano, sin duda, a la siempre buscada estabilidad financiera y económica conseguida en los últimos meses después de enhebrar planes de carácter social con medidas sui generis para frenar la salida de dólares de las arcas del Banco Central, negociación de la deuda con los bonistas mediante. La foto del primer año de gestión del Frente de Todos, tras la malograda herencia macrista, buscó mitigar los efectos de la pandemia en materia social y económica, pero también muestra con claridad los desafíos que se vienen, y de ello dejará constancia el titular del Ejecutivo. En el último año, Desarrollo Productivo redobló la apuesta por el programa Precios Cuidados, con verificaciones que pasaron de cuatrimestrales a trimestrales a las que se sumó un segundo programa, Precios Máximos. También se congelaron las tarifas de servicios públicos y combustible, se edificó una estructura de restricciones cambiarias colocando un impuesto al dólar ahorro y turismo, que institucionalizó una brecha entre el tipo de cambio oficial y paralelo en torno al 70%. Tomando siempre como parámetro la recesión de los últimos años macristas, se devolvió el IVA a los 13 alimentos de la canasta básica. Se llevó a cabo la negociación de la deuda con los fondos privados y ahora con el FMI y el Club de París. Sin embargo, los números evidenciaron el esfuerzo fiscal. El déficit en el primer año de gobierno (pandemia mediante) se ubicó en el 8% y la proyección en el Presupuesto aspira a 4,5% para este año. El ministro Guzmán ya ha anticipado que eso se financiará un 40% con emisión monetaria (hay proyecciones privadas en $1,7 billones) y 60% fondeándose con deuda en el mercado local. El tipo de cambio promedio será de $102,40 y la inflación, señala el ministro, se ubicará en el 29%, aunque los números en el arranque de este año lo hacen de difícil consecución. Por esa razón, las consultoras ponderan una inflación que se ubicaría cerca del 48% y un dólar más alto, en torno a los $124. Aprovechará la Casa Rosada entonces la inercia política que generó la primera reunión con las cadenas alimenticias para hablar de precios y su preocupación en mantener la inflación en los niveles más bajos que sean posibles. Febrero habría terminado con una inflación en alimentos por encima del 4% mensual. Le servirá para mostrarse atento a lo que pasa en la calle, si bien la mesa de negociación con empresarios ofrece otros registros no tan lineales que se detallarán. Uno de ellos fue la propuesta que bajó del Ministerio de Desarrollo Productivo a los distintos eslabones de la cadena para llevar adelante un trabajo coordinado y basado en cinco ejes con el fin de corregir los “aumentos injustificados”. Esos ejes abarcan a los insumos alimenticios y los no alimenticios tanto del agro como los de la industria. Previo al encuentro, los industriales habían pedido poner fin al congelamiento de precios y a la prohibición de despidos y suspensiones. Sin embargo, en el discurso, las fuentes señalan que el Gobierno se enarbolará como el encargado de controlar precios y evitar el impacto en las familias de menores ingresos. Se hará mención de proyectos y herramientas que están pensados para asistir en la consecución de ese objetivo y en la posibilidad de hacer cumplir de forma estricta la ley de abastecimiento de alimentos, programas para que se atomice más la oferta de productos en góndola, al margen de mantener monitoreado el sector. Dólar, tasas y anclas varias
También ayuda el sector externo. Los precios de las principales materias primas de exportación vienen trepando en torno a un 30% si se lo compara con el mes de septiembre. Las lluvias acaecidas en las últimas ocho semanas y la anunciada ampliación de los Derechos Especiales de Giro (DEG) del FMI (a la Argentina le tocarían unos u$s3.000 millones para engrosar reservas), podrían implicar un impulso en las cuentas externas. No obstante, las novedades llegan del Banco Central. La entidad dio a conocer su Informe de Política Monetaria (IPOM). Allí señala que la mayor velocidad inflacionaria en diciembre y enero tuvo un “carácter transitorio”. Por esa razón, sostiene, no habría aplicado una suba de tasas de interés. El informe señala que la entidad que conduce Miguel Pesce “seguirá enfocada en absorber los esfuerzos anticíclicos de manera de preservar los equilibrios monetario y financiero, asegurando las condiciones necesarias para que el proceso gradual de reducción de la tasa de inflación continúe”. El eje, como siempre, se pone en las tasas. Una Leliq paga en promedio un 38% anual y un plazo fijo se ubica apenas por debajo, en torno a un 37% lo que supone una remuneración muy ajustada (o por debajo) de la tasa de inflación, anualizada, que se vio en enero y que probablemente podrá verse en febrero. En rigor, el dólar también se menciona. Sostiene el BCRA que “continuará con su política de administración del tipo de cambio, propiciando que la dinámica cambiaria contribuya a consolidar el proceso gradual de baja en la tasa de inflación”. En otro párrafo, se señala que “dado que en el mediano plazo siguen siendo objetivos centrales la acumulación de reservas y el mantenimiento del superávit externo, el BCRA procurará mantener el tipo de cambio real en un nivel competitivo, acorde a los fundamentos de la economía”. Una excursión a la tierra del dólar informal muestra algunos registros interesantes. El blue rebotó el último viernes hasta los $146, luego de encadenar tres caída consecutivas, si bien en los primeros dos meses de 2021 acumuló un retroceso de $21 y su cotización se ubica por debajo de los dólares financieros, MEP y liqui. De esta manera, la brecha con el oficial mayorista bajó al 62,5%. El último jueves el spread había alcanzado el nivel más bajo desde el 20 de abril de 2020. Si se toma una comparación histórica, la cotización se encuentra en niveles similares a los de fines de septiembre, antes del brusco salto que llevó la cotización hasta los $195 el 23 de octubre del año pasado. La duda, como se dijo, es cómo conducirá el ciclo económico Martín Guzmán. Si promoverá un ritmo de crawling-peg por debajo de la inflación y qué efecto podría tener esto en la brecha cambiaria. En el manual de usos múltiples, pareciera que el discípulo de Stiglitz, junto a Pesce, apuntan a utilizar el tipo de cambio y, en menor medida, las tasas, para anclar las expectativas inflacionarias y llevarlas, lentamente, a coincidir con las premisas que se intentan marcar en los acuerdos en marcha vinculados a precios y salarios.
(AMBITO) Con cepo y todo, el «canuto» se llevó u$s159 millones en enero
Luego de que en diciembre, por temas impositivos y motivos estacionales, el sector privado no financiero mostrara un nivel de atesoramiento negativo, el mes pasado volvieron a las andanzas. En enero pasado el sector privado (familias y empresas, no bancos) volvió a atesorar dólares billetes, luego del impasse del mes anterior, por un total de u$s159 millones lo que representa un incremento interanual del 164%. El atesoramiento se compuso de u$s198 millones en billetes y de un flujo negativo de u$s39 millones en concepto de repatriación de inversiones de residentes en el exterior. De modo que la denominada “Formación de activos externos del sector privado no financiero” (FAE), también conocida como atesoramiento retornó a niveles similares a los de octubre pasado. Este fenómeno que en el mercado bautizan como “fuga de capitales” implica que pese a todo y al super cepo, la economía se pierde de un flujo de fondos neto en promedio de más de u$s1.900 millones anuales. Es un promedio similar al del 2017, previo a la “gran” fuga y al del 2011, gestación del cepo. Estamos hablando de más $170.000 millones que podrían generar alternativas de financiamiento en el mercado local. Pero por diversas causas, además de la incertidumbre, optan por refugiarse en el colchón o en alguna caja de seguridad o cuenta del exterior. De esta manera el “canuto” o reserva de los que tienen alguna capacidad de ahorro continúa su engrosamiento. Cabe recordar que el año pasado el FAE ascendió au$s2.853 millones bajo pandemia y cepo.
Los datos que surgen del Balance Cambiario del BCRA, a cargo de Miguel Pesce, muestran además que en enero 2021:
La formación neta de activos externos de residentes del sector privado no financiero resultó en egresos netos por u$s98 millones, y estuvo conformada por compras netas de billetes por u$s137 millones y transferencias netas de divisas recibidas del exterior por u$s39 millones. El resultado de billetes se explicó exclusivamente por las compras netas de las “Personas humanas”, dado que el resto del sector privado culminó el mes con un resultado neutro por este concepto. Las “Personas humanas” compraron billetes por u$s144 millones y vendieron por u$s7 millones (vale recordar que estas operaciones se dieron en el marco de las nuevas restricciones). En cuanto a la demanda y la oferta, hubo 754.000 individuos que compraron billetes, mientras que unos 36.000 vendieron, con compras y ventas per cápita para ambos casos de 191 dólares. Se registraron transferencias netas recibidas desde cuentas propias en el exterior que totalizaron u$s39 millones. Estas transferencias fueron recibidas por el “Sector Real” por u$s42 millones e “Inversores institucionales y Otros” por u$s22 millones y enviadas por las “Personas Humanas” por u$s25 millones (en este caso, contra débitos en cuentas locales en moneda extranjera, “canjes”, con efecto neutro en el resultado de operaciones de cambios). Las inversiones de no residentes registraron ingresos netos a través del mercado de cambios por u$s71 millones, básicamente por inversiones directas. El sector que mayores ventas realizó por el ingreso de inversiones directas fue el sector “Petróleo”, totalizando u$s35 millones. La cuenta “Servicios” registró un déficit de u$s187 millones explicado principalmente por los egresos netos por “Fletes y Seguros” y “Viajes, pasajes y otros pagos con tarjeta” por u$s208 millones y u$s140 millones, respectivamente. Estos movimientos fueron compensados parcialmente por ingresos netos por “Servicios empresariales, profesionales y técnicos” por u$s177 millones. El conjunto de entidades cerró enero con una posición vendida a término en moneda extranjera por u$s396 millones, incrementando su posición vendida en u$s218 millones respecto al cierre del mes previo. Durante enero, las entidades compraron u$s322 millones directamente a clientes, “Forwards”, y vendieron u$s540 millones en mercados institucionalizados. Las entidades extranjeras vendieron en forma neta u$s93 millones y las nacionales por u$s124 millones, cerrando el mes con posiciones vendidas netas de u$s178 millones y u$s218 millones, respectivamente.
(AMBITO) Cuáles serán los aumentos que se dispararán en marzo
Mientras el Gobierno busca un acuerdo de precios y salarios para intentar contener la suba, hay aumentos ya pautados en diversas áreas. Marzo comenzará con aumentos en prepagas, subtes, colegios, taxis y VTV. Mientras tanto el Gobierno busca avanzar en un acuerdo de precios y salarios para intentar frenar la escalada inflacionaria. Entre los incrementos que ya están pautados se encuentran los que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires comenzará a aplicar este lunes en las tarifas de subte, premetro, taxis y estacionamiento, que llegarán hasta un 44% entre marzo y abril. Desde este lunes el viaje en subte pasará a valer $25,50, para luego saltar a $30 en una fecha a determinar entre abril y mayo. Así, acumulará un incremento del 42,8% con relación al valor actual. Por su parte, en los taxis, la suba será del 44% en dos tramos (en marzo y abril), mientras que el premetro aumentará de $7,50 a $10,70, lo cual representa un avance de 42,7%. También subirá la tarifa de la Verificación Técnica Vehicular (VTV), en un 45% y en el sistema de estacionamiento por parquímetros el incremento será del 100%. En marzo llegarán también los ajustes en las matrículas y las cuotas de colegios privados y, según informó la Asociación de Entidades Educativas Privadas Argentinas (ADEEPRA), ya se autorizaron incrementos del 15% en la provincia de Buenos Aires y del 25% en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El Gobierno también autorizó en las cuotas de la medicina prepaga que será del 3,5%. Además, volverán a actualizarse los impuestos específicos que gravan la nafta y el gasoil, al igual que el valor de los biocombustibles, si la administración de Alberto Fernández no lo posterga. Estos ajustes podrían impactar, según especialistas del mercado, en un 2,6% en el litro de nafta y un 2,1% en el del gasoil sobre el precio de referencia de CABA. En marzo, por el cambio de estación, se esperan también aumentos en la indumentaria, calzado y marroquinería. En cuanto a los útiles, según informó la consultora Focus Market, la canasta escolar de 23 artículos, arrancó en febrero con un ajuste promedio que supera al 45%, mientras se espera que sigan en alza para marzo. Para contener el alza en los precios, la Secretaría de Comercio Interior presentó el programa «Vuelta al Cole con Precios Cuidados», que establece valores de referencia para la canasta escolar antes del inicio del ciclo lectivo, que estará vigente hasta el 31 de marzo, con un aumento promedio del 21%.
(AMBITO) FMI aclara: investigará préstamo a Macri, pero no lo incluirá en negociación con Guzmán
Se trata de una investigación interna, que servirá a modo de jurisprudencia para futuros créditos. Sus conclusiones no impactarán en nuevo acuerdo. El Fondo Monetario Internacional (FMI), en su máximo nivel, le confirmó este fin de semana a los negociadores argentinos que habrá una investigación sobre el Stand By firmado y ejecutado (no en su totalidad) entre el organismo y la Argentina en los tiempos de Mauricio Macri y Christine Lagarde. Pero le dejó en claro a los interlocutores locales, que las conclusiones de esta investigación interna formarán parte de un “paper” de distribución interna; y que servirá como jurisprudencia hacia delante. Pero que de “ninguna manera” influirá en las discusiones que hoy mantienen el organismo que ahora maneja Kristalina Georgieva y el país. Dicho de otra manera, en el caso que los investigadores del préstamo histórico (por el monto y las características) encuentren irregularidades técnicas (o de las otras); estas conclusiones no serán tenidas en cuenta para que el Facilidades Extendidas que se negocia con Argentina tenga características menos exigentes en tiempos y flexibilidad de pagos. Los interlocutores de Washington le deslizaron a sus pares de Buenos aires que una alternativa de este tipo debería ser resuelta en otros ámbitos menos técnicos y más poderosos. Concretamente, el despacho de Joe Biden y el resto de los líderes europeos. Curiosamente, el mismo mecanismo que utilizó Macri con Donald Trump y que ahora el FMI estudia por su potencial irregularidad. Si la advertencia que escucharon dentro del gobierno de Alberto Fernández el fin de semana desde Estados Unidos se cumple, no habría reciprocidad. Esto es, para paliar el mal que se hizo desde el FMI ayudando a Macri, no debe esperar el gobierno argentino actual flexibilidades igualadoras. Como tampoco sanciones duras contra los hombres y mujeres que intervinieron desde el organismo en la operación en cuestión, ya que, básicamente, las dos personas involucradas, Lagarde y el entonces número dos el norteamericano David Lipton, ya no forman parte del cuerpo del FMI.El organismo financiero internacional había confirmado el viernes, que desde el 19 de enero de este año está en carpeta la elaboración de un informe por parte de la Oficina de Evaluación Independiente (OEI) (una especie de “asuntos internos” del FMI), de diferentes momentos críticos de la gestión Lagarde; incluyendo el Stand By a la Argentina al que se lo considera “una política de acceso excepcional” a los créditos del Fondo. Lo describe como un “caso difícil” por la poca “sustentabilidad” del préstamo. Sin embargo se aclara que las conclusiones que se obtengan servirán sólo para “mejorar la habilidad del organismo para aprender lecciones de su propia experiencia”. En todo caso, se resume, el “paper” serviría para que no haya más prestamos de este tipo, y no para que haya una negociación más flexible con el país. Concretamente, lo que se investigará no es el otorgamiento general del crédito en 2018, sino un momento puntual entre abril y mayo de 2019; cuando el FMI liberó unos u$s4.500 millones programados dentro del Stand By, para que el gobierno de Mauricio Macri ejecute política monetaria y cambiaria. Dicho en términos criollos: para contener el dólar en el mercado abierto y legal; vendiendo divisas ante una demanda que crecía ante la cercanía de las elecciones. Este tipo de autorizaciones está prohibida por el estatuto del FMI, y sólo pudo autorizarse con la intervención directa de los Estados Unidos ante la conducción de Lagarde-Lipton. La intervención directa fue del secretario de Tesoro, Steven Mnuchin, quien en la última semana de abril de 2019, cumplió una orden que le dio su jefe Trump. Mnuchin le había mencionado un mes antes a su par local Nicolás Dujovne, que ante cualquier dificultad extrema que tuviera Argentina sólo debía llamarlo personalmente. Y si el reclamo fuera razonable, no habría problema para acceder al pedido. Siempre y cuando no se tratara de un préstamo directo, lo que sería imposible de aprobar en el Congreso norteamericano. Macri a Trump y Dujovne a Mnuchin le hablaron de la posibilidad de disponer de los dólares del Stand By vigente para contener las presiones sobre el dólar; lo que fue aceptado por ambos. Restaba que desde el FMI se diera un cambio radical en su política interna de prohibir expresamente (y en particular a la Argentina) el acceso de dinero proveniente de los préstamos del organismo para contener corridas cambiarias. El carcelero de esta opción era David Lipton, que hasta la asamblea general del FMI de primavera (abril) mantenía una posición pétrea e innegociable sobre esta cuestión. Lipton recibió el llamado de Mnuchin, y luego de negarse en varias oportunidades, dijo que solo lo ejecutaría si Lagarde se hacía responsable de la operación. En esos días ya sabía el FMI que el Stand By vigente era imposible de cumplir por parte de la Argentina. Lo había dicho internamente el responsable de la misión argentina, el italiano Roberto Cardarelli (hoy al frente del caso de Egipto), quién ya recomendaba a mediados de 2019 que las partes debían discutir un Facilidades Extendidas. El economista romano recomendaba además una liberación de u$s 10.000 millones más, y la aplicación de dos reformas impostergables según su visión: la laboral y la previsional. Eso, además de continuar con la ejecución del plan de déficit cero que intentaba aplicar Dujovne. Para Macri esta posición era una rendición. Motivo por el cual decidió jugarse la carta de la llamada telefónica a su aliado Trump, que luego demostró tener palabra. El gobierno argentino de entonces tendría liberada una parte del Stand By para contener al dólar, política que se mantuvo hasta un día después de haber perdido las PASO en agosto de 2019.
(AMBITO) ¿Causó más muertes el covid-19 en Argentina que enfermedades respiratorias otros años?
El cantidad de fallecidos en 12 meses rondará los 53.000. Entre 2016 y 2018, los decesos por neumonía, influenza, bronquiolitis y otras patologías similares, que fueron desplazadas por la pandemia, provocaron más de 60.000 fallecidos por año. El domingo próximo, 7 de marzo, se cumplirá un año del primer muerto por coronavirus en la Argentina. Guillermo Abel Gómez había llegado de Francia el 25 de febrero, el 28 comenzó a sentir síntomas y falleció en el Hospital Argerich. Desde entonces, el país acumula unos 52.000 decesos por esta causa. Al ritmo actual diario, estimando los casos que se sumarán en esta semana, las víctimas fatales, en doce meses, rondarían a las 53.000. Según los especialistas, el covid-19 desplazó al resto de enfermedades infecciosas del sistema respiratorio como influenza, neumonía, bronquitis, bronquiolitis y demás. “El covid copó todo. Esto es algo habitual en las pandemias, que el virus predominante desplace al resto”, aseguró a Ámbito Alejandro Chirino, coordinador de la sección de enfermedades infecciosas de la Asociación Argentina de Medicina Respiratorias (AAMR). De esta manera, se desprende que las muertes originadas por este tipo de patología habrían sido motivadas, casi con exclusividad, por el mal que sacude al mundo desde inicios del 2020. Hasta el momento, las últimas estadísticas que se cuentan en la Argentina sobre causas de mortalidad llegan hasta el 2018 y son suministradas por el Ministerio de Salud. Tomando estos informes como fuente confiable, las defunciones totales en el país se ubican entre 330.000 y 350.000 personas por año sobre la base de los datos oficiales. La Dirección de Estadísticas e Información de Salud (DEIS) de ese ministerio clasifica la totalidad de los decesos por tipo de patologías. Así se sabe que, en 2016, murieron 65.185 argentinos por enfermedades del sistema respiratorio, con las mencionadas neumonía e influenza, bronquiolitis entre las principales. En 2017, las víctimas fatales por enfermedades del sistema respiratorio fueron 64.869 mientras que, en 2018, llegaron a 61.668. Del 2019, no hay registros oficiales todavía, pero sobre base de la opinión de especialistas, fue un año con un comportamiento normal de este tipo de patologías, por lo que se puede suponer que, números más, números menos, habrían rondado entre 60.000 y 65.000 casos. Es decir, si se toma la opinión de los expertos, sobre el desplazamiento de estas enfermedades como consecuencia de la aparición del covid-19, y se comparan las defunciones por causas infecciosas respiratorias de los últimos años, se podría concluir que, en números concretos, el coronavirus no provocó más muertes que otros años. Sólo se habría sustituido una causa por otra. “Desde que empezó la pandemia se dejaron de ver las neumonías clásicas o gripes de invierno. Los agentes infecciosos se pelean por los huéspedes. Cuando el covid arreció, desplazó a los otros agentes. Recién en estos días se empieza a ver alguna neumonía porque hay menos casos de covid porque estamos en una pausa epidemiológica”, agregó Chirino. En una carrera, el virus que más rápido se propaga gana. La opinión del especialista coincide con la del director del Hospital Fernández, Ignacio Previgliano: “El covid fue la patología preponderante de los últimos meses. Por ejemplo, no vimos casos de bronquiolitis. Los cuidados de la gente, el uso de tapaboca, ayudó a evitar estas patologías. Pero, sin duda, el covid desplazó a otras enfermedades respiratorias. En el caso de mi hospital, llegó a representar el 80% de la ocupación de camas de terapia intensiva. El resto fue para enfermedades de otro tipo”. Si se toman en cuenta estos datos, donde la cantidad de muertos por covid no supera a los decesos por patologías que fueron desplazados, habría que analizar el impacto que provoca en la población la permanente información sobre infectados y muertos que hubo estos últimos meses contra las defunciones, sin difusión, de otros años por enfermedades respiratorias. Distintas fuentes consultadas mostraron cautela en el momento de minimizar la gravedad del coronavirus por el hecho de que termine provocando menor mortalidad a la que se produce otros años por infecciones respiratoria, aunque dejan trascender que esa podría ser la conclusión que se obtenga cuando pase la pandemia y se cuente con cifras totales. “En la Argentina no hay estadísticas confiables. Se pueden estimar muchas cosas, pero no hay números que se puedan tomar como precisos. Hoy en día se le hace hisopado a cualquier persona con síntomas y eso es algo que no se hace nunca”, aclaró Carlos Luna, expresidente de la AAMR. En todo caso, advierten los profesionales, la probabilidad mayor es que haya un aumento de las muertes durante el 2020 como consecuencia del incremento de decesos por otro tipo de enfermedades por no haber sido detectadas a tiempo, como consecuencia del temor de la población a concurrir al médico. “Durante todo el año pasado y hasta hoy se ha visto una caída en la atención en guardias y hospitales de cardiovasculares o cerebrovascular. En las guardias llegaban casos avanzados por no haber concurrido a tiempo. Por ejemplo, nosotros tuvimos una baja de hasta 80%, en el peor momento de la cuarentena, de cirugías cardíacas. Hoy todavía estamos 30% debajo de los niveles anteriores a la pandemia. No llegamos ni a tener la misma facturación que un año atrás pese al impacto de la inflación”, explicó a Ámbito, Sebastián Defranchi, director general del Hospital Universitario Fundación Favaloro. “Vamos a tener que esperar un año o dos para el impacto en muertes que tuvo la pandemia en enfermedades fuera de las vinculadas al sistema respiratorio”, agregó el profesional. En este punto, mucha gente suspendió sus tratamientos oncológicos o demoró la concurrencia a una consulta por miedo a contagiarse de covid-19, lo que impidió una detección temprana de tumores. Esto puede terminar generando muertes en los próximos meses que se podrían haber evitado. Lo mismo sucede con cuadros de depresión, por el encierro prolongado, que haya sido caldo de cultivo para enfermedades que costarán vidas en los próximos años.
(BAE) Sin lluvias, peligran los rindes en soja y maíz
La cosecha gruesa muestra señales de caídas en los rendimientos, que también alcanza al oeste de Buenos Aires. Se necesitan precipitaciones en los próximos diez días para sostener las estimaciones de producción. En el inicio de la cosecha gruesa, el clima seco compromete el desarrollo de los cultivos de soja y maíz, de acuerdo a estimaciones privadas. Existe un dato que preocupa a los productores de la zona núcleo: con una media de lluvias que en febrero suele ubicarse entre 100 y 120 milímetros, el promedio en la región no superó los 25 milímetros. En el campo siguen el día a día de las precipitaciones, mientras el clima juega su partido de cara a una cosecha gruesa que según distintas estimaciones, rondará las 100 millones de toneladas. Según advirtieron desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) la situación para la soja “es extremadamente variable”, y las regiones más afectadas son el extremo sur y la franja oeste de Santa Fe y en el norte Buenos Aires, en especial el oeste. En esas regiones, la oleaginosa necesita en los próximos diez días entre 40 y 100 milímetros. En el caso de Pegamino, en pleno corazón de la zona núcleo, el cultivo se encuentra en las fases críticas de definición de rinde, y aunque por el momento soporta la falta de agua, preocupa el impacto que podría generar este panorama. En el oeste de Santa Fe, la entidad rosarina relevó pérdidas de hasta un 10% del potencial de rinde en campos buenos, de 25% en intermedios y en el caso de establecimientos con suelos de baja calidad, el porcentaje oscila entre 40% y 50%. Si la falta de agua se extiende, ¿cómo se verán afectados los rindes de la oleaginosa? La BCR estimó que de extenderse la escasez de lluvias, el rinde la soja podría caer entre 200 y 1.000 kilos por hectárea, más allá de las lluvias que se registraron en los últimos días. El oeste bonaerense es otra de las zonas afectadas por el estrés hídrico. Consultado por BAE Negocios, el productor y asesor Pedro Seeber describió un panorama de contrastes en esa región. En el caso de maíz, explicó que en el caso de las siembras tempranas, se estiman rindes de 8.000 a 8.000 kilos por hectárea. “Hacia la zona de Villegas, los maíces intermedios implantados en octubre están quemados”, reconoció. Por el lado de la soja, destacó que en líneas generales, la de primera necesita agua, mientras que la de segunda recibió precipitaciones, pero de manera dispersa. En maíz, la entidad bursátil adelantó que en la zona de Pergamino comenzó la cosecha de los primeros lotes de maíz temprano, con rindes preliminares que se encuentran un 20% por debajo en relación al año pasado. Así, proyectaron que el cereal en la zona núcleo se ubicaría en un promedio de 9.600 kilos por hectárea, unos 1.000 kilos menos en comparación al ciclo 2019/20. En una sintonía similar, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) destacó en su último informe semanal que la falta de lluvias y las elevadas temperaturas comprometen las etapas finales de los cultivos de verano. “En los próximos siete días se esperan temperaturas por encima de la media, sin perspectivas de precipitaciones que mejoren la disponibilidad en el corto plazo”, remarcaron. Y agregaron: «de no registrarse lluvias en el corto plazo que permitan sostener el escenario actual, durante las próximas semanas podríamos caer en potencial de rinde a cosecha». En paralelo, la bolsa porteña informó que comenzó la cosecha de girasol, que alcanzó a cubrir el 20% de la superficie sembrada. Hasta el momento, los rindes en el sur del área agrícola fluctúan entre 1.200 y 3.000 kilos por hectárea, pero con promedios que se acercan a los históricos y permiten sostener las estimaciones de producción en 2,7 millones de toneladas.
(BAE) Sin IFE ni ATP, el Gobierno dejó atrás le mega ayuda en pandemia
Este año espera que la reactivación compense la caída de ingresos y no requiera ayuda extra que complican las cuentas públicas. En 2020 la emisión récord para financiar el paquete de medidas paliativas de la pandemia, como el IFE y el ATP, que para este año el Gobierno eliminó en pos de una reducción del déficit, pese a la persistencia de la crisis, fue del 7, 4% del PBI. Este porcentaje significa más de 2 billones de pesos. Semanas atrás fuentes de Economía señalaron que para este año proyectan emitir el equivalente a 3,2% del producto para cubrir la mayor parte del déficit financiero de 2021 presupuestado en 6 puntos del PBI. El 2,8% restante se fondearía con endeudamento. Igualmente, esto dependerá de si se logra una ampliación del crédito de instituciones como el Banco Mundial, el BID o la Corgoporación Andina de Fomento, y del cierre de la negociación con el Fondo Monetario Internacional ( FMI,) que dejará un programa con metas plurianuales. Este mes, el ministro de Economìa, Martín Guzmán, tiene previsto un viaje a Washington para empezar a desandar el tramo final de la renegociación de deuda con el FMI. Joaquín Waldman, economista de Ecolatina, afirmó que el 4,4% proyectado podría reducirse «si empieza un rollear más deuda (y por el 120% pero podría modificarse), consiguen más fondos de multilaterales o desarman más del FGS Sustentabilidad de la Anses) «.
(INFOBAE) El regreso del carry trade: cómo ganar en días de dólar calmo y cuáles son los riesgos
A pesar de la precaria calma cambiaria, muchos inversores se animan a apostar por hacer ganancias en divisas con activos en pesos. Como en toda inversión de riesgo, los resultados no están garantizados. La baja de los tipos de cambio paralelos desde octubre a esta parte y la afirmación del ministro de Economía, Martín Guzmán, respecto a que buscará usar el dólar como un ancla al moverlo este año a una velocidad menor a la de la inflación hicieron que el adorado dólar se transforme en una mala inversión de corto plazo. En los últimos meses, y de la mano más que nada del boom de inversiones indexadas por inflación, las apuestas del mercado han estado destinadas más que nada a colocaciones en pesos con el aliciente de que las ganancias se cuentan en dólares. El carry trade volvió al mercado financiero local. La también llamada “bicicleta financiera” consiste en vender dólares para colocarlos en inversiones de corto plazo en pesos con el objetivo de ganarle a la evolución de la divisa y tener la capacidad de comprar más dólares cuando termina de girar la rueda. Es una estrategia que, con variantes según el instrumento que se elija y los momentos de entrada y salida, viene dando muy buenos resultados en los últimos meses. En los últimos meses, y de la mano más que nada del boom de inversiones indexadas por inflación, las apuestas del mercado han estado destinadas más que nada a colocaciones en pesosClaro que se trata de una inversión de riesgo: a una ganancia potencial importante se le opone como posibilidad, una potencial pérdida también dolorosa. Pero, para hablar de rendimientos pasados que nunca predicen rendimientos futuros, tenemos los casos más recientes. Por ejemplo, la semana que terminó este último viernes el dólar MEP que se opera en la Bolsa subió 1,09%, lo que volvió perdedora a la estrategia al menos contra las tasas más cortas. Ahora, en las últimas dos semanas, cayó 3,7%, permitiendo un muy buen rendimiento. La estrategia de carry a la que se están animando muchos inversores en el mercado local es una bastante particular y arriesgada. “Para hablar de carry trade tradicional tendríamos que estar viendo tasas de interés fuertemente positivas -superiores a la inflación esperada- y la disponibilidad de muchos instrumentos para hacerlo, como en su momento fueron las Lebac, eso no está ahora. Hay un retroceso en el tipo de cambio, es cierto, y yo no espero una escapada del dólar hacia adelante, pero es una situación de bastante riesgo”, dijo José Bano de Invertir Online. “Hoy no tenés ningún instrumento de corto plazo que tengan tasas altas, ampliamente por encima de la inflación. Tenés bonos CER, pero los cortos están en tasa negativa, o sea que están rindiendo menos que la inflación”, agregó. Sin una tasa de interés ampliamente por encima de la inflación y pocos instrumentos para hacerlo, el carry es una opción de riesgo (Bano)
Para Giselle Colasurdo, especialista en mercado de capitales y youtuber financiera, se trata de una opción que puede ser válida para quien conozca los riesgos. “El mejor instrumento para hacerlo tiene un plazo de 90 días, y acá pueden pasar muchas cosas en 90 días”, comentó.Pero yendo a los procedimientos, existen distintas formas de intentar la estrategia. Algunas de ellas ya están agotadas.
Algunos ejemplos
La primera, más sencilla, es de cortísimo plazo y usa cauciones bursátiles. Tiene a favor el menor tiempo que resta la posibilidad de encontrar factores inesperados, pero también en contra que en los trades de corto plazo es muy difícil acertar el timing. Es común comparar a la caución bursátil con plazos fijos en la Bolsa, aunque su lógica sea distinta, porque es una colocación a plazo que paga una tasa predeterminada en pesos. En los hechos, se trata de ceder dinero a un tercero -un préstamo- que utiliza esos fondos para invertir. Al final del contrato esos fondos más una tasa de interés. Para garantizar el pago, los tomadores de cauciones tienen que dejar en forma de aforo activos de mercado como bonos, acciones y letras. Lo interesante es que a diferencia del plazo fijo la caución se puede pactar a plazos menores al mes. Por ejemplo, este viernes último, una caución bursátil a 7 días pagaba 32% nominal anual, algo más de un 0,61% en directo en una semana. La apuesta es muy sencilla, si el dólar MEP -el único al que se puede entrar y salir sin límite de montos, siempre y cuando no se esté impedido de operar- se mantiene estable o baja durante el tiempo que dura la inversión, se puede recomprar más dólares al final del contrato. Con toda la curva CER en rendimiento negativo la opción de hacer carry con Fondos Comunes de Inversión está descartada (Giselle Colasurdo)
¿Cómo le fue en los últimos 7 días a la caución como instrumento de carry? Perdió frente a un alza del 1% del MEP. Una segunda opción es ir a la otra tasa lógica, la de los plazos fijos en pesos tradicionales a 7 días. Están en torno al 37% anual para personas humanas en depósitos de menos de $1 millón. Es un rendimiento mensual directo del orden del 3% en 30 días. De nuevo, una estabilidad del tipo de cambio MEP o un retroceso. ¿Cómo le fue en los últimos 30 días al plazo fijo como instrumento de carry? Ganó, frente a una baja del 3% del MEP.
(INFOBAE) Las 10 exigencias del FMI para firmar un acuerdo con la Argentina
Más allá de la especulación sobre los tiempos para firmar un nuevo programa, estos son el diagnóstico y las premisas de Washington para permitir que el país aplace el pago de su deuda de USD 45.000 millones. Más allá de los tiempos, tarde o temprano el gobierno argentino firmará un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar el pago de la deuda de USD 45.000 millones en un plazo de 10 años. Mientras que algunas versiones dan cuenta de que ahora el Gobierno cambió de opinión y ya no quiere firmarlo en mayo, como afirmó varias veces el ministro Martín Guzmán, sino después de las elecciones de octubre, lo cierto es que la Argentina no quiere pagar los vencimientos de capital entre este año y 2023. Por lo tanto, necesitará otro programa, más allá de lo que haga con el pago de los USD 1800 millones del 22 de septiembre (que podría cubrirse eventualmente con la emisión de los DEGs prevista por los países socios del organismo). Bajo esta premisa, estas son las 10 premisas y el diagnóstico del Fondo sobre la situación argentina y cómo debería corregirse con la firma de dicho programa, según pudo saber Infobae de calificadas fuentes en Washington.1 – Desequilibrios macroeconómicos: el Fondo cree, como lo expresó el año pasado, que el país tiene importantes desajustes en materia fiscal y monetaria que deben ser corregidos, tomando en cuenta el contexto de la pandemia, pero con una dirección unívoca.
2 – Inflación: Creen que la persistente suba de los precios al consumidor -que ubica a la Argentina como el segundo país con mayor inflación de la región- debe ser atacada de raíz con instrumentos macroeconómicos, tal como se hace en el resto de los países. La inflación es alta por los desequilibrios del país, más allá del efecto coyuntural de la suba del precio de las materias primas que juega su rol, aunque acolchonado por las retenciones a las exportaciones.
3 – Déficit fiscal: creen que la meta del presupuesto nacional no es ambiciosa (4,5% del PBI) y que hay que hacer un esfuerzo mayor, no sólo del aumento de los recursos tributarios, sino también del gasto público, pero todo dependerá del nivel de crecimiento económico de este año y del paquete de reformas que implemente el Gobierno, con o sin acuerdo con el FMI.
4 – Brecha cambiaria: aunque la brecha bajó respecto de su pico de agosto pasado y se estabilizó en torno del 60%, el FMI cree que todavía es alta y conlleva riesgos de una nueva disparada si no se eliminan los problemas de fondo. La persistencia de tipos de cambio múltiples desincentiva la mejora de los indicadores en el comercio exterior y es un riesgo para la cuenta corriente, afirman.
5 – Emisión monetaria: se valora el esfuerzo del equipo económico para reducir la velocidad de emisión, aunque consideran que el programa previsto para este año todavía genera riesgos de multiplicar los desequilibrios mencionados.
6 – Aumento de las reservas del Banco Central: aunque el equipo técnico de la entidad que preside Miguel Pesce destaca el aumento de las reservas, en realidad en buena medida esto se da en un contexto de duro cepo, que el Fondo aprueba solo en términos transitorios. La prueba de fuego sería ver si el Central logra aumentarlas con menos controles, en un marco de reactivación.
7 – La reforma del Estado: dentro del capítulo de las cuestiones estructurales que van dentro de un acuerdo de facilidades extendidas como el que quiere firmar el Gobierno, el organismo multilateral quiere observar una mayor eficiencia en el sector público. Es necesario, se afirma, que el sacrificio necesario para que la economía vuelva a crecer se reparta en forma equitativa entre el sector privado y el Gobierno.
8 – Aumento de la inversión: el Gobierno debe brindar un rumbo claro y categórico para que retorne la confianza y la economía crezca en forma sostenida. Los precios de los bonos argentinos reflejan actualmente todo lo contrario al ubicar al país en el tope del ranking de riesgo país.
9 – Reforma impositiva: el equipo económico prometió el año pasado que plantearía a la sociedad una reforma tributaria que nunca dio a conocer. En cambio, se ha conocido una iniciativa para reformar parte del impuesto a las ganancias que fue diseñada por el presidente de la cámara de Diputados, Sergio Massa. En paralelo, se permitió que las provincias aumentaran nuevamente sus tasas de ingresos brutos, rompiendo una vez más un pacto fiscal firmado hace menos de cuatro años
10 – Más allá de cada cuestión por separado, el nuevo programa debe funcionar como un todo para asegurar que la Argentina no vuelva a caer en otra crisis de deuda en el corto plazo. Es decir, se tomará en cuenta el pedido de flexibilidad que hizo el Ministerio de Economía, pero con límites, por dos cuestiones: la Argentina tiene un récord de programas firmados y no cumplidos con el organismo y, por otro lado, el resto de los países que han acordado programas durante el último año han aceptado las condiciones vigentes para acuerdos de este tipo. La posibilidad de otorgar una excepción -el staff ya manifestó su desacuerdo con el crédito otorgado al gobierno de Mauricio Macri, que se concedió por presión de la administración Trump- sentaría un mal precedente que podría generar el reclamo de otros gobiernos.
Cuatro fuentes consultadas en Washington -el organismo no quiso dar su versión al respecto- indicaron a Infobae que, más allá de la empatía retórica de la directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva, hacia el Gobierno, no habrá un trato diferencial. Sí puede haber una mayor celeridad para la negociación, pero eso no asegura que pueda haber un acuerdo si el staff y, sobre todo, los países más relevantes del organismo consideran que no se cumplen las premisas para firmarlo. Esto implica, un programa económico consistente en términos monetarios y fiscales, como lo plantearon tanto Georgieva como el staff. “El FMI ha hecho muchos acuerdos en el último año a raíz de la crisis económica de la pandemia, con exigencias para cada uno de los países que los firmaron. Si cerrara un acuerdo más flexible con la Argentina, enseguida el resto de los gobiernos le va a reclamaría un trato igualitario, con menos exigencias”, explicó una fuente con acceso a las negociaciones. “Si el país no implementa ninguna de las reformas que le está pidiendo la comunidad económica internacional, tendrá problemas en sus reservas, cambiarios y fiscales, lo cual repercutirá en el tamaño y la sustentabilidad de su recuperación”, agregó la fuente. Otra fuente colocó un matiz: aclaró que, por la pandemia, posiblemente se acepte el “gradualismo” del ministro Guzmán para bajar el déficit fiscal al 4% del PBI este año, sobre todo si se mantiene la tendencia a la suba de la recaudación, por la reactivación, la suba de las materias primas y la mayor presión fiscal. Pero esto no significa, aclaró de inmediato, que no se pidan condiciones más exigentes para 2022 en adelante, dado que será un acuerdo, como quiere el Gobierno, a 10 años. “Hay buena predisposición del staff y de la junta de directores para que haya un acuerdo, sobre todo porque ven buena voluntad en el ministro Martín Guzmán, aunque temen por lo que pueda hacer la vicepresidente Cristina Kirchner”, agregó, con conocimiento de las tensiones internas del oficialismo. Este decálogo suena amplio –en realidad es más extenso, dado que un AFE requiere otras medidas estructurales– pero parte de la base del deseo del gobierno de reprogramar la deuda a largo plazo. Si quisiera menos requisitos, podría optar por otro stand by, como el que se firmó en 2018, pero tendría menos años para repagar. Lo que no puede, afirman en Washington, es gozar de más tiempo a cambio de menos exigencias.
(CRONISTA) Gasíferas pedirán aumentos que encarecerían las tarifas hasta 20%
Los nuevos cuadros tarifarios propuestos por las licenciatarias de los servicios públicos incluyen subas de entre 50% y 60% en el segmento regulado, que tendría un impacto en el costo final de los usuarios. Las distribuidoras y transportistas de gas ultimaban por estas horas la presentación de sus nuevos cuadros tarifarios, aunque algunas empresas ya pidieron recomponer sus ingresos entre un 50% y un 60% a partir del 1 de abril, lo que tendría un impacto de alrededor de un 20% en las boletas que les llegan a los usuarios. Los nuevos cuadros tarifarios propuestos por las licenciatarias de los servicios públicos incluyen subas de entre 50% y 60% en el segmento regulado, que tendría un impacto en el costo final de los usuariosEstos números difieren largamente de los aumentos que está dispuesto a reconocer el Gobierno. El interventor del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), Federico Bernal, había dejado trascender entre las compañías que la suba sería de entre 7% y 9% final, que permitiría mejorar en hasta un 29% los ingresos de las licenciatarias de estos servicios públicos. Pero, según pudo saber El Cronista mediante fuentes del sector privado, el organismo instruyó y les dio libertad a las empresas de pedir en sus cuadros tarifarios lo que necesiten, que luego sería analizado y negociado. El martes 16 de marzo esos números serán evaluados en una audiencia pública, que contará con la oposición de las asociaciones de usuarios. Se descarta que el Gobierno no aprobará las propuestas privadas y hará cambios sensibles, lo que llevará a la discusión a otra etapa. En el futuro, las firmas podrían iniciar juicios en tribunales internacionales por el incumplimiento de la Revisión Tarifaria Integral (RTI) 2017-2021, que el Enargas quiere evitar con la firma de acuerdos transitorios. Así fue como algunos de los cuadros, que se publicarían hoy en la web del Enargas, contemplarán propuestas de aumentos en torno a un 20% final, de acuerdo a lo que contó a este diario el directivo de una compañía, en estricto off the record. En el sector también confían que otras firmas presentarán cuadros «razonables», con menor impacto sobre la población. A esta cifra se alcanza teniendo en cuenta el alza de entre 50% y 60% en las tarifas de transporte y distribución que las empresas requieren, aunque remarcan que lo que en realidad consideran que corresponde es entre un 125% y un 148%, basado en la evolución del Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) o «inflación mayorista» acumulada desde abril de 2019. Además, presupone que no habría incrementos en la porción del gas que se traslada a las tarifas. En otras palabras, la propuesta de un aumento de un 20% final implicaría que los subsidios sigan en ascenso, ya que no habría una suba que reconozca el costo del gas (tanto el producido nacionalmente como el importado), y el Estado se tendría que hacer cargo de esa parte. El Ministerio de Economía y la Secretaría de Energía tienen otros planes. En la audiencia pública del lunes 15, estudiarán cuánto del costo del gas debe ser trasladado a los usuarios, en pos de disminuir los subsidios. De cualquier modo, éste será un régimen de transición hasta la renegociación de los contratos, que se iniciaría después de las elecciones legislativas de octubre. La RTI vigente vence en marzo de 2022.
(CRONISTA) Guzmán busca recortar el sobrecosto de un nuevo programa con el FMI
El planteo que hizo en la reunión del G20 apunta a evitar sobretasas que van de los 200 a 300 puntos básicos en el caso de los programas de facilidades extendidas. Qué dicen las reglas del Fondo. Durante la reunión de ministros de Economía y Finanzas y presidentes de Bancos Centrales del G20, Martín Guzmán dejó un pedido para modificar el costo de los créditos del Fondo Monetario Internacional (FMI), que para la Argentina implica una sobretasa de dos o tres puntos de recargo en el eventual nuevo programa de Facilidades Extendidas (Extended Fund Facility, EFF) que se busca cerrar con el organismo. Este año vencen u$s 3600 millones de capital con el Fondo y otros u$s 1000 millones por intereses, de los que ya se pagaron u$s 315 millones. Por el acuerdo extraordinario de Stand By firmado en 2018 durante la administración de Mauricio Macri y renegociado en 2019, la Argentina paga una tasa del 3%, mientras que los créditos regulares del organismo van del 1 al 2%. Ahora el Gobierno busca un EFF que va de 4 a 10 años con pagos en 12 cuotas semestrales iguales más intereses. El pedido de Guzmán fue que el Fondo «revise y modifique los recargos que aplica en los créditos que otorga sobre la tasa de interés básica, ya que crean inequidades que perjudican de forma desproporcionada a los países emergentes y de ingresos medios con las cuotas más bajas y es procíclica, porque impone condiciones más duras a los países que tienen condiciones de mercado más adversas». «El costo de endeudamiento está vinculado a la tasa de interés de mercado del FMI, conocida como la tasa básica, que equivale a la tasa de los Derechos Especiales de Giro (DEG) más 100 puntos básicos, o 1 punto porcentual», detalla el FMI. Pero «los préstamos de gran cuantía» como lo sería la refinanciación de los u$s 44 mil millones otorgados a la Argentina, «están sujetos a una sobretasa de 200 puntos básicos» si el crédito llega al 187,5% de la cuota del país. Si después de 51 meses el crédito sigue por arriba del 187,5% de la cuota, la sobretasa se eleva a 300 puntos básicos. «Estas sobretasas tienen por objeto desalentar un uso importante y prolongado de los recursos del FMI», detalla el organismo. «Esta política será revisada este año, y consideramos que para salvaguardar la estabilidad financiera global, es muy importante que trabajemos juntos para revisar y cambiar esta política, de manera que tengamos un sistema más equitativo y que no sea procíclico», remarcó el Ministro en la videoconferencia del G20 bajo la presidencia de Italia. En su participación, donde también estuvo el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, Guzmán también abogó por una ampliación de los derechos especiales de giro (DEG) que el Fondo reparte entre sus países miembros para respaldar la reactivación de los países de ingresos medios y bajos. La titular del FMI, Kristalina Georgieva busca que se apruebe una ampliación por u$s 500.000 millones, que para la Argentina representarían la llegada de alrededor de u$s 3.300 millones. Se estima que el aumento de las reservas del Fondo llegaría en abril, tras la reunión de primavera en el hemisferio Norte. Asimismo, el titular de Economía manifestó que «la Argentina apoya plenamente una nueva asignación general de derechos especiales de giro, que proporcionará fondos para las economías de ingresos bajos y medios que se necesitan con urgencia». En esta línea, Guzmán aseguró que «el momento en que más se necesitan es ahora, por lo que debemos actuar con rapidez».
(INVESTING) Apple, el negocio más rentable de Warren Buffett.
Warren Buffett mandó el sábado su tradicional carta a inversores, donde destaca sus operaciones en Apple (NASDAQ:AAPL).
Alcanza con su participación en la compañía los 120.000 millones de dólares.
Asegura que gran parte de su riqueza se debe a las recompras de acciones.
Investing.com – Warren Buffett envió este fin de semana su carta a accionistas, como ya es tradición, y en ella destacó su participación en Apple, un negocio que se ha revelado tan rentable como el que le llevó años forjar en la industria del ferrocarril. Berkshire Hathaway (NYSE:BRKa), compañía del oráculo de Omaha, ha alcanzado con su participación en Apple el equivalente a 120.000 millones de dólares, un ‘imperio’ que inició a finales de 2016 y en el que solo ha invertido 31.100 millones de dólares. Eso la convierte en la participación más valiosa de sus Top 3, esto es, junto a sus aseguradoras y BNSF, la compra de la red ferroviaria que completó en 2010, resume Bloomberg. Aunque Buffett siempre se ha mostrado reacio a invertir en el sector tecnológico -decía que no le gustaba invertir en negocios que no entiende- está claro que no ha podido sucumbir a los encantos del negocio de moda, ayudado por otros inversores como Todd Combs o Ted Weschler. Junto a ellos ha añadido acciones de Amazon (NASDAQ:AMZN), Snowflake o Verizon (NYSE:VZ). La estrategia de Buffett con la compañía de la manzana ha sido la de ir comprando hasta 2018, y luego ir desinvirtiendo. Solo en 2020, con las ventas se embolsó 11.000 millones. También ha sido gracias a las recompras de sus acciones con lo que ha podido seguir enriqueciéndose. En la actualidad, Berkshire posee un 5,4% de Apple. Una inversión sin coste, puesto que se ha debido enteramente a las recompras. “Una operación que ilustra el poder de las recompras”, afirmaba el multimillonario inversor en su misiva.
(INVESTING) Baja el dólar al estabilizarse el rendimiento de los bonos
El dólar se debilita al comienzo de la jornada de negociación de este lunes en Europa, y las monedas de más riesgo vuelven a traer atención ahora que el rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense se estabiliza tras la fuerte venta de bonos a escala mundial de la semana pasada. A las 9:55 horas (CET), el índice dólar, que sigue la evolución de esta moneda con respecto a una cesta de otras seis divisas principales, baja un 0,1% hasta 90,752. El par EUR/USD sube un 0,1% hasta el nivel de 1,2090, tras descender un 0,9% al final de la semana pasada, su mayor caída desde abril. El GBP/USD avanza un 0,4% hasta 1,3991, mientras que el USD/JPY se mantiene sin apenas cambios en el nivel de 106,56, cerca de los máximos de seis meses registrados en 106,69 el viernes a pesar de que la actividad industrial de Japón se expandió en febrero a su ritmo más rápido de los últimos dos años y pico. El AUD/USD, muy sensible al riesgo, sube un 0,8% hasta el nivel de 0,7770, tras la caída del 2,1% del viernes, ya que el Banco de la Reserva de Australia dijo que compraría el doble del volumen normal de bonos a largo plazo en sus operaciones regulares de esta semana. El comité de política monetaria del banco se reúne el martes. El NZD/USD se apunta un alza del 0,9% hasta el nivel de 0,7290, revirtiendo parte de las pérdidas del 1,9% del viernes, mientras que el USD/CAD se deja un 0,5% hasta 1,2680. Los mercados de divisas han seguido la estela del mercado mundial de bonos, en el que el rendimiento han aumentado en previsión de la aceleración de la recuperación económica y las expectativas de que los bancos centrales tendrán que ajustar la política monetaria antes de lo que se esperaba. El rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años de referencia asciende actualmente a alrededor del 1,41%, estabilizándose tras haberse situado brevemente por encima del 1,60% la semana pasada y dando a las monedas de mayor rendimiento algo de margen para respirar. El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, ha intentado últimamente apagar algunos fuegos, diciendo que el banco central examinaría cualquier aumento de la inflación a corto plazo, pero los datos de esta semana podrían provocar fácilmente otra chispa. Volverá a comparecer al final de la semana, pero la atención cambiará rápidamente hacia los datos mensuales sobre el empleo no agrícola que se publica el viernes. «Las correcciones del mercado —tras largos y favorables períodos de asunción de riesgos— tienden a ser cortos y pronunciados y hasta que la Fed decida intervenir verbalmente en el mercado de bonos, diríamos que los activos de riesgo siguen siendo vulnerables durante la próxima semana y el dólar podría disfrutar de un breve repunte correctivo», dicen los analistas de ING (AS:INGA) en una nota de investigación. Por otra parte, el par USD/CNY se deja un 0,2% hasta 6,4627 después de que la actividad industrial de China se expandiera en febrero a su ritmo más lento de los últimos nueve meses mientras la débil demanda del extranjero y los brotes de coronavirus lastraban la producción, según una encuesta empresarial. El PMI del sector manufacturero de Caixin descendió hasta 50,9 puntos en febrero, frente los 51,5 de enero, registrando su tercera caída mensual consecutiva.
(INVESTING) La agitación de las acciones motivada por la rápida subida del rendimiento de los bonos del Tesoro parece destinada a seguir acaparando la atención de los mercados esta semana, particularmente si los datos económicos más fuertes impulsan el rendimiento de los bonos del Tesoro aún más. Los inversores se centrarán en el informe de empleo del viernes, que se espera muestre que las restricciones a causa del virus han mantenido a raya el crecimiento del empleo en febrero. También se seguirán de cerca las comparecencias de varios portavoces de la Reserva Federal, entre ellos el presidente Jerome Powell. Todo apunta a que la coalición OPEP+ aumentará discretamente la producción de petróleo en su reunión del jueves, con los precios cerca de máximos de 13 meses. En Europa, el presupuesto del Reino Unido se conocerá el miércoles, mientras que los datos económicos de la zona euro mostrarán cómo está lidiando la economía con las actuales restricciones a causa de la pandemia.
(INVESTING) Tira y afloja entre las acciones y el aumento del rendimiento de los bonos
El cambio hacia acciones del ámbito energético, financiero y otros sectores que se beneficiarán de la reapertura económica se ha acelerado, mientras que el rápido aumento del rendimiento de los bonos del Tesoro está presionando a las acciones tecnológicas que han encabezado las ganancias del mercado durante años. Las acciones tecnológicas son particularmente sensibles al aumento del rendimiento de los bonos porque su valor depende en gran medida de las futuras ganancias, que se descuentan más profundamente cuando suben los tipos de interés. El tono prudente de la Fed, junto con las expectativas de más estímulos, ha impulsado el rendimiento y alimentado las preocupaciones en torno a la inflación y parece ir a continuar el mercado de dos vías, al menos a corto plazo. Mientras tanto, la temporada de presentación de resultados está terminando, pero los minoristas seguirán publicando sus informes, concretamente Target (NYSE:TGT), Kohl’s (NYSE:KSS) y Nordstrom (NYSE:JWN) el martes, y Costco (NASDAQ:COST) el jueves.
(INVESTING) Informe de empleo de febrero
El paquete de ayudas contra el coronavirus de 1,9 billones de dólares del presidente Joe Biden avanza hacia el Senado, y el informe de empleo no agrícola de febrero que se publica el viernes mostrará el estado de la recuperación del mercado laboral. Los datos del Gobierno a finales de la semana pasada mostraron que las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo disminuyeron inesperadamente a su nivel más bajo en tres meses, lo que indica que la desaceleración de la tasa de infección está permitiendo que el mercado laboral gane algo de fuerza. Las ventas minoristas también repuntaron en enero. Los economistas creen que la economía estadounidense habrá creado 165.000 nuevos empleos en febrero, tras el aumento de 49.000 en enero. Pero las tormentas invernales que han azotado el sur podrían complicar el panorama.
(INVESTING) Discurso de Powell
Con el rápido aumento del rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense, los inversores bursátiles podrían esperar que los funcionarios de la Fed aborden el tema de la venta en bonos del Tesoro. El presidente de la Fed, Jerome Powell, hablará sobre la economía en un evento online organizado por el Wall Street Journal el jueves. Hasta ahora ha habido pocas señales de ansiedad entre los funcionarios de la Fed en cuanto al aumento del rendimiento de los bonos del Tesoro. La semana pasada Powell dijo que el aumento es el resultado de una economía más fuerte, pero añadió que la tasa de recuperación económica se ha desacelerado en los últimos meses y reiteró que la política monetaria seguirá siendo relajada algún tiempo. Otros miembros de la Fed que comparecerán incluyen al presidente de la Fed de Nueva York, John Williams, la gobernadora de la Fed, Lael Brainard, el presidente de la Fed de Atlanta Raphael Bostic, la presidenta de la Fed de San Francisco, Mary Daly, el presidente de la Fed de Filadelfia, Patrick Harker, y el presidente de la Fed de Chicago, Charles Evans.
(INVESTING) Reunión de la OPEP+
Con los precios del petróleo en máximos de 13 meses, se espera que en la reunión de productores de la OPEP+ del jueves se discuta el aumento de la producción a partir de abril. La Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, redujo la producción en 9,7 millones de barriles al día el año pasado mientras la pandemia asolaba la demanda mundial. Fuentes de la OPEP+ estiman que un aumento de la producción de 500.000 barriles al día parece posible sin causar una acumulación de reservas, a medida que se recuperan las economías. Rusia está dispuesta a aumentar el suministro. La reducción voluntaria de 1 millón de barriles al día de Arabia Saudí también expira en marzo, y ese suministro puede regresar a partir de abril.
(INVESTING) Presupuesto del Reino Unido, datos de la Zona Euro
En el Reino Unido, el ministro de Finanzas, Rishi Sunak, prometerá más gasto presupuestario el miércoles, pero ésta podría ser la última medida de apoyo relacionada con la pandemia que se ofrezca. Se espera que el presupuesto acumule más endeudamiento, además de los casi 300.000 millones de libras de gastos para combatir el COVID y los recortes de impuestos. El plan presupuestario va a sr centro de todas las miradas, ya que será uno de los principales factores que determinarán el ritmo de la recuperación económica. Mientras tanto, en la zona euro, los datos de inflación, PMI, ventas minoristas y desempleo mostrarán cómo le va a la economía antes de la reunión de marzo del Banco Central Europeo de finales de este mes.
LO MAS RELEVANTE SOBRE LOS CEDEARs (ULTIMAS 24HS)