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- (Cronista) Sequía: ya afecta al 75% de Buenos Aires, sufre el trigo y la siembra de maíz A las preocupaciones sectoriales por las futuras políticas sectoriales, se suma el efecto clima, que puede incluso reperfilar intenciones de siembra. En Buenos Aires, hace 100 días que no hay lluvias importantes. Mientras entre los productores crecen las preocupaciones por la política agrícola de cara a un eventual gobierno de Alberto Fernández, la sequía se extiende por distintos puntos productivos del país y pone en alerta al sector. Aunque todavía es temprano para cuantificar los eventuales daños y perjuicios económicos que acarreará la situación, los incendios en las sierras de Córdoba, mortandad de animales en Salta y los trigales con clara evidencia de necesidad de agua son parte de las postales de estos días en los que se define parte del rendimiento de la campaña de trigo (que comenzará a trillarse en un mes) y el avance de las siembras de verano, con el maíz y la soja disputando hectáreas. La falta de agua se profundiza. Fuente: ORA Como informó El Cronista en su edición del jueves 26 de septiembre, el clima seco y ventoso, los precios más bajos de esta campaña y los temores e incertidumbre política ante un eventual gobierno de Alberto Fernández tallan en las decisiones de siembra de la campaña gruesa. Ya arrancó la siembra de maíz, para el que la Bolsa de Cereales de Buenos Aires espera una expansión interanual de 1,3% en la superficie cubierta, hasta las 6,4 millones de hectáreas. Si bien el área destinada al maíz será récord, se espera que la producción esté 5,6% por debajo del volumen del año pasado. A diferencia de las campañas anteriores, los productores harán más maíz temprano (el que se siembra en la primavera) que tardío (en verano), por lo que los rendimientos serán menores. Sin ayuda del clima En ese sentido, las lluvias que se dieron entre el domingo y el martes sobre buena parte de la región núcleo fueron poco significativas. Y las expectativas no son alentadoras, ya que las previsiones dan cuenta de que al menos hasta el miércoles 9 no habrá nuevas precipitaciones. El avance de la sequía se evidencia en que hace más de 100 días que no se registran lluvias significativas en la provincia de Buenos Aires, donde la falta de humedad en los suelos abarca al 75% de la superficie provincial, sostuvieron desde la Guía Estratégica del Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). «En Capital Federal llovió bien, con 45 milímetros acumulados, pero en las grandes zonas agrícolas de Buenos Aires no se cumplieron las precipitaciones», señalaron desde el GEA, Indicaron que las zonas trigueras de Tres Arroyos y Nechochea, las que más requerían lluvias para el desarrolllo de los cultivos, recibieron entre 15 a 40 milímetros, mientras el resto de las zonas productivas bonaerenses quedaron por debajo de esos registros. Precipitaciones y condiciones de los suelos para el trigo. Fuente: GEA Desde la BCR reforzaron que «las precipitaciones de las últimas 48 horas estuvieron muy lejos de lo que se esperaba» y ejemplificaron por caso la situación en Cördoba, donde las lluvias eran esperadas para aliviar los focos de incendio (que están activos hace una semana), pero «la tormenta dejó decepción». A esa situación se suman ahora las bajas temperaturas, que este jueves podrían derivar en heladas agronómicas en la provincia de Buenos Aires. «El frío sigue instalado y es el principal problema que sostiene la falta de agua», plantearon en el GEA. Pronóstico poco optimista “Octubre empieza frío y esto es un pésimo indicador de que se revierta la falta de lluvias en el corto plazo” explicó José Luis Aiello, doctor en Ciencas Atmosféricas, quien además plantea expectativas poco alentadoras, dado que el clima frío y seco persistiría al menos una semana más. «Las lluvias importantes se están dando sólo en el noreste, el litoral y Uruguay”, agregó el especialista.
- (Iprofesional) Decisión tomada: el Gobierno recurre a los u$s7.200 millones «intocables» de las reservas. La medida tiene el guiño del FMI: permite descomprimir el frente financiero de Macri pero presiona al próximo gobierno, que asumiría con menos reservas. l Gobierno tomó la decisión de echar mano a los u$s 7.200 millones que el Fondo Monetario Internacional había enviado a la Argentina el año pasado y que se mantenían como parte de las Reservas del Banco Central a manera de dólares «intocables». La determinación fue consensuada con el propio Fondo Monetario, de acuerdo con las versiones que corren en la City. Las divisas se irán utilizando a medida que se precisen, ya sea para hacer frente a vencimientos de la deuda -tanto en pesos como en dólares- como así también para tapar el desvío fiscal primario. Es decir, se usarán no sólo para pagar vencimientos sino también para cubrir gastos corrientes del Estado (sueldos, jubilaciones e, incluso, algunas de las medidas que viene tomando Mauricio Macri y que tienen un costo fiscal). La decisión fue tomada ante la postergación, sin fecha, en el envío del desembolso por u$s5.400 millones de parte del FMI. Ese dinero debía llegar a Buenos Aires el pasado 15 de septiembre. Los u$s7.200 millones que ahora se utilizarán habían sido remitidos por el Fondo el año pasado, como parte del paquete de ayuda a la Argentina. Se había establecido que estas divisas servirían para fortalecer las reservas del Banco Central. No para pagar vencimientos de deuda ni para intervenir en el mercado cambiario. De ahí que fueran «intocables». Ese esquema cambió a partir de ahora. La decisión tiene todo un costado político: implicará que -sin el desembolso del Fondo previsto-, las reservas sufran un bajón adicional, por el equivalente a lo que el Gobierno vaya utilizando. Funcionarios de primer nivel, tanto de Hacienda como del Banco Central, consideran que en las próximas semanas tendrán que utilizar «prácticamente la totalidad» de los u$s7.200 millones. Cupos para importación, crédito barato y «compre nacional»: el plan de Alberto para la industria De ahora en más, habrá que observar la reacción de Alberto Fernández ante esta novedad. El candidato viene protestando por la baja de las reservas. De hecho, la última vez que alzó la voz por ese tema fue en el mediodía del miércoles, tras el encuentro que mantuvo con la cúpula de la Unión Industrial. Lo cierto es que la anuencia del FMI para que se toquen los dólares «intocables» equivale, en los hechos, a haber aprobado la cuota de u$s5.400 millones que las nuevas autoridades del organismo dejaron en suspenso. Desde el punto de vista del gobierno de Macri, el efecto es el mismo, porque permite afrontar la acumulación de vencimientos de corto plazo. En cambio, el que sí notará el efecto de esta medida es el próximo gobierno, porque deberá arrancar con un Banco Central significativamente más débil, lo cual dejará a los funcionarios de la próxima administración más expuestos a aceptar las condiciones de la contraparte a la hora de sentarse a negociar el futuro del acuerdo stand by. Según pudo saber iProfesional, a cambio de los dólares que el Banco Central le compre al Tesoro (es en el Tesoro donde están depositados esos u$s7.200 millones), la autoridad monetaria emitirá los pesos necesarios. El dato es el siguiente: el BCRA está dispuesto a esterilizar los pesos emitidos. «La política monetaria seguirá siendo contractiva», asegura Guido Sandleris cuando le preguntan por los detalles de la operación. La lógica intención del banquero central pasa por disminuir el riesgo de que esos pesos terminen presionando sobre el tipo de cambio, en medio de las tensiones electorales. Esta cuestión también guarda un costado político: ¿Qué dirá Alberto F. cuando el stock de reservas caiga y, además, la bola de Leliq continúe agrandándose? Cómo abonará ANSES la diferencia entre la jubilación mínima y el 82% del salario mínimo vital y móvil La visión de Sandleris es que esta cuestión deberá dirimirse entre Fernández y Macri a partir del lunes 28, en caso de que el peronista gane las elecciones y se convierta en Presidente electo. «Obligará a una coordinación entre ambos», dice el banquero central a sus eventuales interlocutores. Por lo pronto, de acuerdo a un informe reservado para clientes de la consultora Elypsis, postula que los «dólares intocables» de las reservas ya están siendo utilizados. Dice Elypsis: «La caída de los depósitos del Tesoro en dólares (u$s1.400 millones) el viernes pasado sugiere que el Gobierno comenzó a utilizar parte de los u$s7.216 millones prestados por el FMI para fortalecer las reservas internacionales del BCRA, que en principio no iban a ser utilizados -y no formaban parte del cálculo de reservas netas disponibles para intervenciones-. Números inquietantes Desde hace semanas vienen circulando por la City informes inquietantes, en los que se advierte que la economía adolece de un faltante en pesos y otro posible en dólares, que se necesitan cubrir para llegar sin turbulencias a fin de año. Un reporte de la consultora MacroView le pone números a ese agujero: lo sitúa en $265.000 millones (por la parte en moneda local). Para la parte en dólares, todo depende de la actitud del Fondo Monetario. La cosa es así: si el FMI envía los u$s5.400 millones, entonces habrá capacidad para abonar los u$s2.950 millones que vencen de Letes hasta fin de año, que no fueron reperfiladas, por tratarse de tenencias de «personas humanas». Te puede interesar Carlos Melconian, contundente: «No volvemos más al dólar libre y flotante» Es más, si así fuera, y el Fondo cumpliera con el envío, habría un sobrante de unos u$s2.420 millones. Que podrían aplicarse a paliar -en parte- el bache (necesidades) en pesos. De todas maneras, ni siquiera con el desembolso del FMI alcanzaría para cubrir el agujero en pesos. Al tipo de cambio actual, en torno a los $60, aquellos u$s2.420 millones que sobrarían no podrían calzarse con el déficit en pesos, que llega a $265.000. En números: esos u$s2.420 millones -equivalentes al día de hoy a $143.000 millones- dejarían un agujero en las cuentas de unos $122.000 millones. Ese es el escenario más optimista que manejan algunas consultoras de la City, como la de Melconian. Que obligarían, por caso, a monetizar ese dinero, con el consecuente riesgo de que aumente la presión sobre el tipo de cambio. Ni hablar si se da el escenario más pesimista -aunque para muchos el más realista- de que el Fondo Monetario no desembolse los u$s6.400 millones de acá hasta fin de año. Si no ingresaran esas divisas, directamente no habría dólares para abonar las Letes. Esta posibilidad fue analizada por la agencia Moody’s en el reporte elaborado en las últimas horas. «Si el FMI retuviera el próximo desembolso de u$s5.400 millones, anticipamos que probablemente se produciría una reacción severa del mercado. Cancelar ese desembolso podría desencadenar una reacción negativa, generar una inestabilidad macro y financiera significativa y comprometer aún más la débil posición crediticia de Argentina», afirmó Moody’s en su informe anual sobre el país. Pero ahora, con el cambio de actitud del Fondo, la situación tiene un nuevo matiz. Al Fondo le sirve, porque no se vería obligado a tomar una medida -la aprobación de la cuota de u$s5.400 millones- que le resulta incómoda. Y a Macri le sirve, porque le desahoga el frente financiero. La presión quedará para el gobierno entrante.
- (Ambito) Massa, embajador financiero, parte a EEUU, China y Rusia para Cristina Reparto de roles diplomáticos en el futuro hipotético gobierno de Alberto F. Nueva York y Washington en el centro de la escena (por necesidad). Canales ocultos con bonistas y bancos. Mientras el kirchnerismo agita la bandera china como fuente de inspiración ante la escasez de recursos que deberá seguir enfrentando el país después de las elecciones, los contactos más concretos y reales que el albertismo mantiene con el exterior son sin dudas con los Estados Unidos. Es cierto que las relaciones con China son y serán un eje estratégico perdurable para el país, pero de plata grande se habla con el norte. El propio Alberto Fernández ya sentenció hace una dos semanas que “un país como Argentina no puede enemistarse con Estados Unidos”. Esa realidad involucra tanto las relaciones financieras del país con bonistas y bancos como las que deberá mantener por muchos años más con el FMI. Ese mensaje de Alberto F., entonces, fue para la interna militante y revoltosa del peronismo ya que los economistas que entran y salen de las oficinas de la calle México llevando papeles nunca pensaron que hubiera otro destino que ese. Los contactos de Guillermo Nielsen y los mensajes cifrados que llegan desde el Fondo a las oficinas de Alberto F. son una confirmación de esa realidad. Y en medio de esos ruidos aparecen protagonistas que están guiando esas vías de comunicación que se abren entre el albertismo y los Estados Unidos por carriles diversos y Sergio Massa esta llenando todos los casilleros para quedarse con el lugar. El tucumano Juan Manzur ofició de delegado en Washington y Nueva York y tuvo el mérito de ser uno de los primeros del ala política en hacerlo. El gobernador salió de los Estados Unidos casi al mismo tiempo que llegaba Mauricio Macri para la ONU. Y por eso tuvo pedidos de varios de bancos y empresas para mantener reuniones, todos desesperados por tener noticias sobre la salida en Argentina. Fue la voz oficial del peronismo eterno que representan los gobernadores en Wall Street, si se le puede poner un nombre. Antes que Manzur, Massa había probado el poder en Nueva York y Washington marcando territorio. Lo hizo de la mano de su contacto esencial en la política estadounidense que es Rudolph Giuliani, aunque ahora los propios problemas locales pueden obligar a virar algo en al estrategia. Giuliani es el abogado de Donald Trump y esta metido justo en el centro de la tormenta por la presión que el estadounidense hizo sobre el presidente de Ucrania para que este investigara en su país al hijo de Joe Biden en un caso de corrupción. Biden esta en la triada esencial de candidatos demócratas a competir por la presidencia. Tan es así que esta semana los demócratas del Capitolio intimaron a Giuliani para que presente documentación sobre las presiones a Volodymyr Zelensky. El exalcalde de Nueva York, entonces, estará ocupado. En el reparto de roles que se anticipa dentro del peronismo, hay divisiones que comienzan a tomar forma. Cristina de Kirchner, aseguran, pidió tener protagonismo esencial en dos destinos de las relaciones internacionales: Vladímir Putin y Xi Jinping. Para este último caso, se asegura, la expresidenta ya prepara a su propio candidato a embajador, Danilo Vaca Narvaja, hermano de su exyerno y secretario privado. Como reemplazo posible de Diego Guelar, Vaca Narvaja ya habría hecho algunos viajes a Beijing siempre de la mano del politburó. No habría choque en eso con Massa o el equipo de Alberto F. orientado más cultivar la objetiva y necesaria relación con Washington. Tampoco con Felipe Solá que tiene la bendición de Cristina de Kirchner por haber sido el primero en volver al redil de la expresidenta. En rol de embajador financiero Massa viajará nuevamente a EE.UU. este fin de semana. Benjamin Gedan del Centro Wilson ya le mandó carta avisando que en Washington quieren escuchar como les explica la crisis argentina post-PASO. Por ese lugar pasó medio gobierno de Macri y en las últimas semanas también Manzur y Juan Manuel Urtubey Susan Segal, del Council of the Americas, también le organizó almuerzo, cena o desayuno (lo que Massa elija) en Nueva York para que empresarios y banqueros lo escuchen a puertas cerradas. Nada de esto es nuevo para Massa, incluso con algunos de esos participantes ya se encontró antes en oficinas más reservadas en Wall Street. No solo de finanzas, bonos, reperfilamiento y las chances o no de una quita (este último él tema sobre la Argentina que desvela a los mercados) hablaron y hablarán con el tigrense. También esta YPF y Vaca Muerta, otro objetivo dorado que desvela por estos días el reparto de funciones que ya imaginan algunos visitantes de las oficinas de la calle. México.
- (Ambito) El dólar volvió a subir y se consolidó por encima de $60, pese a ventas del Central El billete verde avanzó 12 centavos a $60,22 en bancos y agencias de la city porteña, según el promedio de Ámbito. En el Banco Nación, la divisa se vendió a $59,50, mientras que en el canal electrónico se consiguió a $59,45. El Banco Central intervino con ventas de futuros y de reservas para contener al dólar, que igual avanzó 12 centavos este miércoles a $60,22 y anotó su quinta alza consecutiva en bancos y agencias de la city porteña, según el promedio de Ámbito. En el Banco Nación, el billete verde se vendió a $59,50, mientras que en el canal electrónico se consiguió a $59,45. La suba del minorista se dio en sintonía con el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), donde la divisa ascendió 18 centavos a $57,82 (su valor más alto en las últimas cuatro semanas y media). “La divisa norteamericana replicó el mismo comportamiento de la jornada precedente, con una suba más importante que fue abortada otra vez por las ventas del Banco Central en el segmento de contado y en los plazos más cortos de los mercados de futuros”, analizó Gustavo Quintana, operador de PR Corredores de Cambio. A su turno, Fernando Izzo, operador de ABC Mercado de Cambios destacó: “Como era de esperar, el dólar va a seguir subiendo lentamente en el MULC debido que la oferta de exportadores en general sigue escasa para ingresar la divisa, por estar fuera de ciclo los cerealeros”. Y añadió que “igual la demanda está trabada por las normas del BCRA en la materia de Comercio Exterior y giros para el pago de obligaciones que deben tener aprobación del ente regulador”. Las órdenes de compra instaladas desde temprano impulsaron una suba de los precios que rápidamente escalaron posiciones hasta tocar máximos en los $57,95, treinta y un centavos arriba del registro del final previo y diez centavos por encima del nivel de la apertura de hoy.Grabar No obstante, la aparición del Banco Central con posturas de venta en el sector donde operan bancos y empresas detuvo la suba y, como en el día anterior, comenzó con su estrategia de ir corrigiendo hacia abajo sus niveles de intervención, que finalizó cuando sus posturas de venta se fijaron en los $ 57,82 en los últimos minutos del final de la sesión. Los mínimos se anotaron con puntuales operaciones en los $57,81, momentos antes del cierre de las operaciones de hoy. El volumen total operado en cambios fue de u$s426 millones, un 10,5% menos que ayer. Dólar blue, MEP y CCL En los mercados financieros, el dólar «contado con liqui» – que surge de compra de bonos o acciones, y su posterior venta en el exterior para hacerse de divisas – continúa en alza este miércoles y ganó 2,9% a $67,91, luego de que el Banco Central dispusiera el lunes nuevas limitaciones para la operatoria. El también llamado dólar cable amplía, de esta forma, su brecha con la divisa mayorista al 17,45%, desde el 10% del lunes. En tanto, el dólar MEP o Bolsa cayó un 0,5% a $63,10, lo que implica una brecha del 9% frente a la cotización del MULC. La disparada del dólar en los mercados financieros se produce luego de que el Banco Central estableciera el lunes una serie de restricciones a la compra-venta de títulos públicos para las liquidaciones en el exterior, por parte de personas físicas, de acuerdo con la comunicación A-6799. La medida tiene por objeto desalentar la operatoria off-shore, denominada popularmente como «rulo», mediante la operatoria con títulos públicos. Por su parte, el dólar blue sumó 75 centavos a $61,50para la venta en cuevas de la city porteña, de acuerdo a fuentes consultadas por Ámbito. Tasa de Leliq La tasa de referencia diaria de las Leliq, equivalente a la tasa de política monetaria, fue de 76,986% tras la absorción de $246.682 millones en dos licitaciones. El Banco Central efectuó la primera subasta Letras de Liquidez a siete días de plazo por un monto adjudicado de $96.395 millones. La tasa promedio de corte se ubicó en 76,996%, siendo la tasa mínima de 76,890% y la tasa máxima de 77%. La autoridad monetaria bajó leve la tasa abonada en la segunda licitación del día. Colocó $150.287 millones con una tasa promedio del 76,98%, desde el 76,996% abonado en la licitación anterior. Y covalidó un rendimiento máximo del 77% y un mínimo del 76,725% anual a siete días de plazo. Para garantizar el carácter contractivo de la política monetaria, el Comité de Política Monetaria (COPOM) del BCRA dispuso para octubre un piso del 68% para esta tasa de referencia.
- (Ambito) FMI quiere que Alberto Fernández negocie la deuda «de manera integral» Busca que la discusión incluya a los acreedores externos, internos y al propio organismo. Varios albertistas dudan. Y consideran que hay que aprovechar las posibilidades de avanzar. El Fondo Monetario Internacional (FMI), en su nueva etapa bajo la conducción de Kristalina Georgieva, envió un mensaje dual a la Argentina. El organismo financiero internacional le dejó en claro tanto al Gobierno como al “albertismo”, que la estructura de la deuda global de la Argentina “no es sustentable” y que una negociación con acreedores privados tiene que contar con su intervención. Los responsables del caso argentino en la entidad explicaron con una metáfora simple la situación del país: la Argentina se encuentra bajo la “teoría de un solo bolsillo”. Esto es, los compromisos de pago futuros dependerán de los dólares de que disponga el país, sin importar si se trata de pasivos con privados internacionales, deuda interna o con organismos internacionales. En otras palabras, lo que reclama el FMI es que las discusiones se encaren bajo un “enfoque integral” y no por separado, ya que “todo se conecta con la capacidad de pago del país” la que, según la visión desde Washington, “es alarmante”. Lo que reclama el FMI es que las discusiones se encaren bajo un «enfoque integral» y no por separado. Con esta posición, ya transmitida a Buenos Aires, el FMI muestra dos conclusiones. La primera es que el stand by firmado en septiembre del año pasado “descarriló” y que se deberá discutir rápidamente con la Argentina luego de las elecciones del 27 de octubre el futuro de la relación. Más concretamente, un nuevo acuerdo con metas, compromisos y cronograma de desembolsos renovados. Y que estas negociaciones incluyan los planes de renegociación de deuda con los privados con el pasivo emitido bajo jurisdicción local y extranjera. Según la visión extraoficial del FMI, ese diálogo será con Alberto Fernández, salvo milagros electorales que desde Estados Unidos creen que no ocurrirán. Así se lo hicieron saber al candidato opositor en la reunión que el 26 de agosto mantuvieron en Buenos Aires, los enviados del FMI, el director gerente para el Hemisferio Occidental, Alejandro Werner, y el responsable del caso argentino Roberto Cardarelli. Desde ese encuentro los vínculos entre Washington y las oficinas de la calle México (donde Fernández elabora sus eventuales planes de gobierno), se afianzaron al punto de ser hoy casi diarios. En uno de estos, el organismo fue claro con los economistas albertistas: les inquieta la propuesta que le acercaron diferentes fondos de inversión con altos intereses en bonos en el país, y que se basa (tal como adelantó este diario) en una reprogramación de pagos sin quita y con una luz de años antes del pago de intereses. Según el cronograma de 2020, los vencimientos para el próximo ejercicio alcanzan los u$s25.000 millones, que se suman a otros u$s3.000 que habrá que pagar a organismos multilaterales y a más de u$s12.000 millones de necesidades fiscales, según las proyecciones del propio FMI. La inquietud de Washington ante la propuesta de los fondos internacionales es que no se encuadre en la lógica de sustentabilidad de la capacidad de pago general de la Argentina. Y, en consecuencia, no se puede discutir de manera separada sin el FMI interviniendo como actor fundamental. Según la visión extraoficial del FMI, ese diálogo será con Alberto Fernández, salvo milagros electorales que desde Estados Unidos creen que no ocurrirán. Desde el albertismo se promete que la discusión será rápida con el organismo y que, si se cumplen los pronósticos electorales, ya en noviembre habrá contactos bilaterales sólidos con la persona que el propio Alberto Fernandez designe como negociador oficial. Este será alguien con experiencia en discusiones de este calibre y contactos con el mundo financiero internacional, quién actuará bajo la mirada directa del eventual próximo jefe de Estado. Desde Buenos Aires hacia Washington se descarta que habrá negociaciones duras y difíciles. Pero que debe descartarse que se harán de “buena fé” y con “seria voluntad de pago”. Inmediatamente después se repite el hit del albertismo: “Pero siempre con el horizonte de un país en crecimiento”. Algunas voces económicas que acompañan a Alberto Fernández consideran esta posición del FMI como una preocupación ante la posibilidad que avancen luego de las elecciones, más rápido las negociaciones con los privados internacionales que con el propio FMI. Dudan también sobre la obligación de obedecer al organismo ante la necesidad de una negociación integral. Incluso, varios llegan a la conclusión de que el FMI en realidad está preocupado porque haya un acuerdo integral con los acreedores y que éste limite la capacidad de pago al propio Fondo; y que, en consecuencia éste termine aceptando un plan de mediano y largo plazo similar al que se firmó en 2003 durante el gobierno de Néstor Kirchner. Según esta visión, si existen posibilidades serias de cerrar la discusión con los acreedores externos y solucionar un problema de u$s100.000 millones, no habría que perder la oportunidad. Por ahora, Alberto Fernández analiza todas las posibilidades. Y promete que desde el 28 de octubre el capítulo de la reestructuración de la deuda externa será prioritario y el que más rápidas definiciones traiga. Al menos en cuanto al plan de negociación general, y si se acepta, o no, la teoría del “bolsillo único” y de la negociación integral. Mientras tanto dedica parte de su tiempo a analizar el perfil de vencimientos para el próximo año. Una de las conclusiones a las que se llegó en la calle México es que los títulos más peligroso son los emitidos durante la gestión de Luis “Toto” Caputo.
- (BAE) Cepo cambiario: tensión con el Gobierno por la sorpresiva demora a las importaciones. Exigen informes sobre activos y pasivos externos. A un mes de aplicado el «cepo» cambiario, las operaciones de importación de bienes y servicios se complican cada vez en mayor medida. Las empresas no pueden girar dólares para el pago ya que el Gobierno exige la entrega actualizada de datos sobre activos y pasivos externos, y el sector importador dejó en claro que no es una operatoria rápida de resolver. Fuentes de la Unión Industrial Argentina ( UIA) y de empresas nucleadas en la Cámara de Importadores (CIRA) confirmaron a BAE Negocios que la traba existe y es cada vez más importante porque «el informe sobre los pasivos y activos externos (montos por pagar o cobrar en el extranjero) no se normaliza de un día para el otro. El 1 de septiembre, por la comunicación A 6770, el Banco Central puso como obligatorio para importar algo que era sólo para fines estadísticos, en un intento por frenar importaciones». Mediante la Comunicación A 6770, el BCRA estableció que para acceder al mercado local de cambios para el pago de deudas financieras o comerciales con el exterior deberá demostrarse, en caso de corresponder, que la operación se encuentra declarada en la última presentación vencida del Relevamiento de Activos y Pasivos Externos. Por la Comunicación A 6795, el BCRA modificó sustancialmente el Relevamiento de Activos y Pasivos Externos, obligando a personas físicas y jurídicas a realizar la declaración en caso de presentar deudas con no residentes inferiores al US$1.000.000 al final de los años 2018 y 2019. «Las empresas se descuidaron desde fines del año 2017 y no aportaban los informes al Gobierno porque servían para la estadística y les parecía una cuestión menor; ahora están apurados porque no pueden girar las divisas», narraron en el universo fabril. Con la recesión que no afloja y el tipo de cambio que se disparó en las últimas semanas, lo que encarece las compras al exterior, las perspectivas están lejos de ser alentadoras para el resto del año. «Hace 12 meses que las importaciones vienen en caída libre. El año va a cerrar evidentemente muy mal», había señalado el presidente de la Cámara de Importadores, Rubén García en el marco de un seminario sobre comercio electrónico que la entidad nacional ofreció a sus socios en la Cámara de Comercio Exterior local (Cacec). Según García, el principal problema es el derrumbe del mercado interno, ya que más del 80% de las importaciones argentinas son destinadas a la producción industrial. «Este país no puede vivir sin importaciones y, al no haber mercado interno, se cae todo por la base», evaluó. Para el titular de Cira, no sería descabellada alguna política restrictiva adicional, teniendo en cuenta que «el Gobierno está en una situación bastante caótica, tomando medidas que vino negando sistemáticamente». Las fuentes consultadas alertaron que sería una decisión «nefasta» porque podría profundizar el proceso recesivo y complicar a las compañías que tienen deudas con proveedores extranjeros. «Sería transmitir la sensación en el exterior de que seguimos siendo más de lo mismo», expresaron.
- (Bloomberg) Amazon Web Services construiría centro de datos en Argentina La división en la nube del gigante del retail estadounidense planea un centro de datos regional en una zona de libre comercio. Dónde se ubicaría. a división en la nube de Amazon.com Inc. planea construir un centro de datos regional en una zona de libre comercio en Argentina, según personas familiarizadas con el asunto. La compañía con sede en Seattle se prepara para invertir cerca de US$800 millones en el proyecto a lo largo de 10 años y obtendrá considerables beneficios fiscales al ubicar el centro de datos en los partidos de Bahía Blanca-Coronel Rosales de la provincia de Buenos Aires, dijeron las personas que pidieron no ser identificadas porque no están autorizadas a hablar en público. La decisión de Amazon de colocar parte de su infraestructura en la nube en la segunda economía más grande de Sudamérica es una gran victoria para el gobierno argentino, que desea diversificar la economía en servicios digitales, nanotecnología, aeroespacial y demás. A principios de este año, el Congreso de la Nación aprobó por unanimidad la ley de Economía del Conocimiento, que crea incentivos para que tecnológicas abran negocio allí, un logro importante en un año electoral que ha polarizado a la sociedad. Amazon, como cualquier empresa que se beneficia de la nueva ley, recibirá exenciones tributarias a la exportación, una reducción de la alícuota del impuesto a las ganancias de 35% a 15% y pagará efectivamente menores costos laborales. Además, al ubicarse en la zona de libre comercio, Amazon no pagará impuestos nacionales o provinciales sobre el consumo de energía, un beneficio generoso para un centro de datos. A través de un representante de prensa, la empresa declinó hacer comentarios. El proyecto en Argentina no está finalizado y aún podría tener cambios, dijo una de las personas. Amazon Web Services, el negocio más rentable de la compañía, ha estado expandiendo su infraestructura en todo el mundo para mantener una ventaja sobre rivales como Microsoft Corp. y Alphabet Inc. Se espera que las ventas de servicios y software de computación en la nube sumen un total de US$214.300 millones en 2019, un aumento de 17,5% en comparación con el año anterior, según Gartner. Tener cerca un centro de datos de Amazon ayuda a empresas a reducir costos y mejorar la velocidad de los datos en comparación con tener que depender de sitios fuera del país. Argentina alberga varios equipos en línea, entre ellos su empresa más grande, el minorista de comercio electrónico MercadoLibre Inc., que utiliza AWS para alojar sus plataformas.
Internacional
- (BAE) Fallo de la OMC a favor de EE.UU. preanuncia guerra comercial con la UE. Washington podrá imponer aranceles por US$7.500 millones. El gobierno de Estados Unidos obtuvo una autorización para imponer aranceles por 7.500 millones de dólares a bienes europeos, en represalia por subvenciones ilegales de la Unión Europea a Airbus, lo que amenaza con desencadenar una guerra comercial transatlántica en momentos de debilidad de la economía mundial. El presidente Donald Trump consideró «un gran triunfo» el fallo por el que EE.UU. podrá sancionar a la Unión Europea ( UE) con medidas comerciales. «Es un gran triunfo», remarcó Trump en una rueda de prensa junto a su homólogo finlandés, Sauli Niinistö, en la Casa Blanca. «La OMC ha sido mucho mejor con nosotros desde que soy presidente», agregó el gobernante al celebrar el dictamen del organismo a favor del fabricante aeronáutico estadounidense Boeing a causa de las ayudas y subsidios europeos a su competidor Airbus. La decisión de la Organización Mundial del Comercio ( OMC) sitúa una disputa corporativa de 15 años por el apoyo ilegal a los gigantes de la aviación transatlántica, en el centro de las difíciles relaciones comerciales mundiales y se suma a una guerra arancelaria entre Washington y Beijing. La Comisión Europea dijo en respuesta que una medida de Estados Unidos para imponer sanciones comerciales a las importaciones de la UE sería «miope y contraproducente» y podría causar daños a ambos lados del Atlántico. La OMC ha descubierto que tanto la compañía europea Airbus como su rival estadounidense Boeing recibieron miles de millones de dólares en subvenciones ilegales en la mayor disputa comercial corporativa del mundo, un maratón legal que se remonta a 2004. Se espera que los dos casos conduzcan a aranceles en represalia, comenzando con las medidas de Estados Unidos, lo que planteará nuevos problemas para las empresas y los mercados financieros de todo el mundo. Listado El centro de atención de los inquietos mercados se trasladará ahora a Washington, donde se espera que el Representante de Comercio de Estados Unidos se mueva rápidamente para acotar una lista preliminar de bienes que se encuentran a la espera de ser gravados con aranceles, dijo una fuente estadounidense. La lista provisional de productos que pueden ser objeto de aranceles va desde los propios aviones Airbus hasta los helicópteros, el vino, los bolsos y el queso. En el caso más grande que jamás haya manejado la OMC, Washington había solicitado permiso para imponer aranceles a bienes de la UE por un valor de hasta 11.200 millones de dólares. Bruselas está presionando para que la OMC decida a principios del próximo año sobre aranceles de alrededor de 10.000 millones de dólares para los productos estadounidenses en un proceso paralelo.
- (BAE) Caería 28% el superávit comercial de Brasil por la guerra comercial entre EE.UU. y China. Recálculo oficial del gobierno. El impacto que las disputas comerciales internacionales tienen en la economía de Brasil obligó al gobierno de Jair Bolsonaro a revisar su estimación de superávit comercial de 2019, que cayó de los US$56.700 millones previstos inicialmente a US$41.800 millones. La cifra representa una caída de 28% respecto de los US$58.000 millones de superávit comercial de 2018. El gobierno también redujo los pronósticos para las exportaciones totales de este año, de US$234.500 millones a US$222.000 millones. «Dado que los precios internacionales de los productos están cayendo, es muy probable que el comercio mundial se retraiga también este año», anticipa el subsecretario de estadística de comercio exterior, Herlon BrandÒo, que señaló que la guerra comercial entre Estados Unidos y China es la razón principal de los recortes. «Brasil se inserta en este escenario de contracción del comercio mundial debido a una menor actividad económica global», agregó. Por otro lado, el gobierno revisó al alza sus estimaciones para las importaciones, porque la recuperación económica esperada estimularía la demanda de maquinaria importada. Según el gobierno, las importaciones debieran sumar US$180.400 millones este año, por encima de los US$177.700 millones previstos anteriormente. En los primeros nueve meses, el superávit comercial de Brasil llegó a US$33.790 millones, frente a los US$41.637 millones del mismo período de 2018.
- (Bloomberg) Economistas recortan los pronósticos de crecimiento para Argentina Los economistas recortaron sus pronósticos de crecimiento para Argentina este año y el próximo, mientras esperan que el peso se debilite aún más que antes y la inflación se mantenga alta. Los economistas recortaron sus pronósticos de crecimiento para Argentina este año y el próximo, mientras esperan que el peso se debilite aún más que antes y la inflación se mantenga alta. Se prevé que la economía se contraiga 2,9% este año y 1,5% en 2020, según una encuesta mensual del banco central publicada el miércoles. Ambos años fueron revisados casi a la mitad respecto a la encuesta anterior, y los economistas redujeron su pronóstico de crecimiento para el cuarto trimestre de 2019 a una contracción de 1,1% en comparación con los tres meses anteriores. Fue la primera encuesta realizada después de que el gobierno del presidente Mauricio Macri implementara controles de capital, en medio de una crisis monetaria. Se espera que el peso argentino termine este año en 65 por dólar, más débil que la tasa actual de 57,82 por dólar. Los analistas estiman que el peso alcanzará 88 por dólar para fines de 2020, según la encuesta. Las expectativas de inflación para 2019 se mantuvieron prácticamente sin cambios en 54,9%, mientras que los economistas elevaron su pronóstico para 2020 a un nivel de 40,5%.
- (Investing) Trump anuncia aranceles sobre las importaciones de la UE La Administración Trump ha abierto un nuevo frente en la guerra comercial, anunciando unos aranceles de importación sobre una serie de productos europeos tras obtener el visto bueno de la Organización Mundial del Comercio para tomar represalias contra la injusta ayuda estatal a Airbus (PA:AIR). Además de unos aranceles del 10% sobre los aviones Airbus (PA:AIR), se han implementado unos aranceles del 25% sobre el whisky escocés, el queso parmesano y diversos productos de lujo, aunque no sobre los artículos de cuero. Los aranceles de Airbus no afectan a los componentes enviados a la fábrica de la empresa en Mobile, Alabama, algo que podría apaciguar a las aerolíneas estadounidenses que se han posicionado en contra de tener que pagar más por los aviones Airbus.
- (Investing) Los temores de crecimiento resurgen tras los débiles datos de los PMI y las noticias del Brexit La agenda de hoy está dominada por la publicación del índice de gestores de compras del sector servicios de IHS Markit y los índices compuestos de gestores de compras, junto con las encuestas del sector no manufacturero del Instituto de Gestión de Suministros. Las cifras de Markit de Europa fueron peores de lo esperado, pues el PMI compuesto de la eurozona ha descendido hasta 50,1 puntos, sólo un pelín por encima de la línea que divide la expansión de la contracción. El índice compuesto del Reino Unido se sitúa por debajo de 50 en 49,3, desencadenando una nueva venta de acciones del Reino Unido, agravada por una reacción negativa de Bruselas a las propuestas del primer ministro, Boris Johnson, para los ajustes de un acuerdo de retirada para asegurar un Brexit ordenado el 31 de octubre.