DAILY
| RIESGO PAÍS (15/01/2020) | 1854 | -1.5% |
Local
- (Infobae) Donald Trump apoya a Brasil en lugar de la Argentina para el ingreso a la OCDE Jair Bolsonaro está más cerca que Alberto Fernández de la Casa Blanca por lo que Washington optó por Brasil para recomendar su ingreso a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. En la Casa Rosada buscaron minimizar el impacto de la decisión. El presidente de Estados Unidos Donald Trump suele ser impredecible. En las últimas horas dio un nuevo giro en su recomendación de países para integrar la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). En este caso decidió apoyar a Brasil por sobre Argentina en el acceso a la organización internacional tal como había hecho a comienzos del año pasado. Otra vez la decisión tiene que ver con un trasfondo político: el arribo del presidente Alberto Fernández al sillón de Rivadavia en lugar de Mauricio Macri fue el argumento que terminó de inclinar la balanza a favor del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, con quien la Casa Blanca tiene mayor afinidad. Según pudo saber Infobae, la noticia no generó preocupación en el entorno de Fernández, sobre todo a raíz del contexto económico que atraviesa el país en medio de la emergencia económica. Ser miembro de la OCDE implica cumplir con ciertas pautas y requisitos muy estrictos en materia económica. Cabe recordar que el en octubre el gobierno de Estados Unidos se negó a respaldar la propuesta de Brasil de unirse a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), lo que marcó un cambio tras meses de apoyo público por parte de altos funcionarios. El secretario de Estado, Michael Pompeo, rechazó una solicitud para discutir una mayor ampliación del club de los países más ricos, según una copia de una carta enviada al secretario general de la OCDE, Ángel Gurria, el 28 de agosto y vista por Bloomberg News. Agregó que Washington solo respaldaba las ofertas de membresía de Argentina y Rumania. “Estados Unidos sigue prefiriendo la ampliación a un ritmo mesurado que tenga en cuenta la necesidad de presionar por la gobernanza y la planificación de la sucesión”, mencionaba la carta. El mensaje contradijo la postura pública de EEUU sobre el asunto. En marzo, Trump dijo en una conferencia de prensa conjunta con el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, en la Casa Blanca, que apoyaba que Brasil se uniera al grupo de 36 miembros. Y en julio, el secretario de Comercio de EE.UU., Wilbur Ross, reiteró el respaldo de Washington a Brasil durante una visita a San Pablo. En la misiva, enviada el 28 de agosto se afirma que “los Estados Unidos prefieren realizar nuevas incorporaciones a la OCDE (un club de las grandes potencias occidentales) a un ritmo lento, que implique presionar a los países por la planificación de la gobernanza”. En la nota, Pompeo manifestó la prioridad que Washington da a las candidaturas de Argentina y Rumania. En cambio, excluyó de la nómina a Brasil. La organización está integrada por 36 países, la mayoría europeos. Y a ellos se les suman Estados Unidos, Canadá, México, Chile, Japón, Corea del Sur, Australia, Nueva Zelandia y Turquía. El canciller de Brasil, Ernesto Araujo, celebró la decisión de Trump de respaldar a Brasil en su recomendación a la OCDE. “El anuncio prioritario de EEUU a Brasil para ingresar a la OCDE demuestra una vez más que estamos construyendo una asociación sólida con EEUU capaz de generar resultados a corto, mediano y largo plazo, en beneficio de la transformación de Brasil en la gran nación que siempre quisimos ser”, publicó en la red social Twitter. Una vez que se formalice el apoyo de Estados Unidos, Brasil necesitará el apoyo del resto de los integrantes de la OCDE para iniciar el proceso formal de acceso al organismo. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos es una organización internacional cuya misión es diseñar mejores políticas para los países que la integran. Su objetivo es promover políticas que favorezcan la prosperidad, la igualdad, las oportunidades y el bienestar. Trabaja en colaboración con gobiernos para establecer estándares internacionales y proponer soluciones a problemas sociales, económicos y medioambientales. Asimismo, asesora en materia de políticas públicas y en el establecimiento de estándares y normas a nivel mundial en ámbitos que van desde la mejora del desempeño económico y la creación de empleo al fomento de una educación eficaz o la lucha contra la evasión fiscal internacional. ¿Cuáles son las ventajas de ser miembro de la OCDE? Los especialistas enumeran cuatro ventajas fundamentales. 1. La OCDE monitorea los datos económicos de sus miembros y los provee de estadísticas confiables y comparables para fijarse objetivos y progresar. 2. Sirve como foro de discusión y análisis de diferentes temáticas y a la vez realiza informes específicos según la petición de los países. 3. Fundamenta sus sugerencias en evidencias y se mantiene al margen de los debates políticos. 4. Es un sello de calidad para la inversión extranjera al tener que cumplir estándares de políticas públicas para ser miembro, éstas mejoran. Por eso se incrementa la confianza e los inversionistas extranjeros. ¿Cómo es el proceso de ingreso? A la OCDE se accede solo por invitación y tras recibir el convite los países deben presentar una serie de informes sobre su legislación, su política y las prácticas en una serie de temas desde el medioambiente a la inversión extranjera, agricultura y educación. La información es revisada cuidadosamente por 23 comités técnicos y para ingresar se requiere el visto bueno de 35 miembros. Tanto Argentina como Brasil han presentado su candidatura para integrar la OCDE y esperan una invitación. Mientras que de Europa esperan su turno Rumania, Croacia y Bulgaria. En tanto, Colombia Costa Rica y Lituania están en el proceso de acceso que lleva varios años. Países candidatos a la adhesión Convertirse en país miembro de la OCDE es un proceso exigente. Los países tienen que estar preparados para ser miembros, lo que no solo significa cumplir nuestra misión y adherirse a nuestros valores, sino también ser capaces de asumir las responsabilidades y exigencias que acompañan al estatus de miembro activo de la organización. Para convertirse en miembros, los países pueden presentar su candidatura o ser invitados por el Consejo de la OCDE a iniciar un proceso de adhesión. Se establece entonces una hoja de ruta para la adhesión que determina las modalidades, las condiciones y el proceso que debe respetarse. Se realiza un examen técnico para evaluar las políticas y las prácticas del país en comparación con las mejores prácticas de la OCDE. También se estima la capacidad del país para implementar las normas del organismo. Esta fase se suele traducir en una serie de medidas que el país debe implementar para poder cumplir los requisitos de membresía de la OCDE. Cada país debe ratificar la adhesión a la OCDE para convertirse en miembro efectivo.
- (Infobae) Sorpresa en otras provincias endeudadas por la decisión de Axel Kicillof y expectativa por el impacto que podría tener un default bonaerense Los gobiernos provinciales que tienen que afrontar pagos en el corto plazo aseguran que un incumplimiento de Kicillof podría arrastrar al resto. Los ministros de Economía de las diferentes provincias desayunaron leyendo la solicitada de la provincia de Buenos Aires, una publicación que generó mucha sorpresa entre los hombres y mujeres que administran los distritos y negocian modificaciones en los perfiles de sus deudas. “Fue una sorpresa, no fue algo que esperábamos”, le dijo a Infobae un funcionario de una de las provincias más importantes del país. “Ahora hay que esperar para ver como nos puede pegar la posibilidad de que Buenos Aires entre en default”, agregó. Esta misma sensación se fue repitiendo en la mayoría de los funcionarios provinciales consultados en donde puntualizaban en que nadie esperaba el pedido de reformular y la posibilidad cierta de una cesación de pago de la administración de Axel Kicillof en tan poco tiempo. “En especial, es todo una novedad que la Nación no salga en rescate y que lo aclare. Por un lado significaría tirar por tierra todo el esfuerzo pero, por el otro, habría que ver cómo repercute que la provincia entre en default», agregó una segunda fuente de otra de las provincias de mayor peso. En medio de esto, se reunió el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, con el ministro de Interior, Wado de Pedro. Córdoba hoy envió un comunicado a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires en donde confirmó el pago de USD 16.031.259 en concepto intereses de su bono CO27 que tiene fecha de vencimiento el próximo 3 de febrero, justo tres días antes que Buenos Aires caiga en default si no lograr reperfilar la deuda. “No lo enviamos por la solicitada de Buenos Aires, es algo normal el aviso del pagó”, explicaron desde la provincia mediterránea. El texto, firmado por la secretaria de Administración Financiera, Mónica Zornberg, asegura que el gobierno hará “efectivo el pago” en tiempo y forma, de acuerdo con el cronograma previsto. Pero la duda persisten en el resto de las provincias. Dudas sobre las posibilidades ciertas de un default. “Nosotros estamos discutiendo la necesidad de herramientas para poder afrontar las deudas que tenemos. Habíamos pedido la emergencia económica y la rechazaron pero la volveremos a solicitar en febrero, en las sesiones extraordinarias”, dijo el ministro de Gestión Pública de Santa Fe, Rubén Michlig. “El problema nuestro, de Santa Fe, está en la deuda flotante, que es importante, producto de los déficit consecutivos de los últimos doce años”, dijo el ministro de Omar Perotti. “Suba del dólar, recesión, caída de 10% de la recaudación hace que no se pueda crecer y generar ahorros que permita hacer frente a las deudas. La provincia de Buenos Aires debe tener una situación similar pero mucho más complicada por magnitud y por la deuda externa”, agregó el ministro. Para Michlig el problema no es discutir el número -ya que muchos señalan que los USD 275 millones que es la cifra que tiene que pagar Kicillof no es de gran peso- “porque no cambiar la magnitud de la cifra porque cuando te consumiste las posibilidades para pagar es lo mismo que sea 10 o 100”. Pero mientras las negociaciones comienzan y se superponen los análisis sobre las razones por las que el Gobierno señaló que no iba a ayudar antes de que Buenos Aires anunciara formalmente que no podía pagar, todas las miradas se posan en el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof y las posibles soluciones. “No sé cómo se puede resolver ni qué están conversando con la Casa Rosada y con los acreedores, nuestra estrategia es la de apostar a los organismo internacionales más que la emisión de deuda, pero está claro que la caída de Buenos Aires tendrá consecuencias y nos puede arrastrar a todos, además de obviamente complicar la negociación de la Nación”, dijo Michlig.
- (AMBITO) Serio: el BCRA ya tiene un stock de deuda casi igual a la base monetaria. Existe la creencia de que la bomba de las Leliq ya se desactivó. Nada más alejado de la realidad. El año pasado el ente monetario pagó intereses por casi $693.000 millones. Este año se perfila otro récord. No hay duda que la gestión del gobierno del Frente de Todos enfrenta serios desafíos heredados y ya tiene varios frentes abiertos en medio del “veranito” de los mercados. Y dentro del cóctel de retos el tema monetario es uno de los claves. Al respecto, la atención de los analistas está puesta en el “día después” de la fuerte emisión monetaria registrada desde noviembre pasado. Esto se refiere al momento a partir del cual los pesos emitidos y en manos del público en general comienzan a retornar al sistema financiero. Es decir cuando la demanda de dinero pega la vuelta. Eso comienza a ocurrir a partir de la segunda quincena de enero. Los optimistas creen que gran parte de los excedentes quedará en los bolsillos de la gente y el resto podría ser fácilmente esterilizado por el BCRA. En realidad apuestan al bajo nivel de monetización de la economía. Pero la historia monetaria argentina es muy rica en aleccionar a los desmemoriados. Más allá de la fuerte expansión monetaria acumulada entre noviembre y diciembre del 2019, hay un tema que vuelve a soslayarse. Se trata del stock de la deuda remunerada del BCRA que ya supera los $1,5 billones. Esto equivale a casi la base monetaria. O sea, entre la emisión primaria y la deuda remunerada hay el equivalente a más de $3 billones. Vale recordar que la deuda remunerada del BCRA, compuesta por los Pases Pasivos (son colocaciones de los bancos en el BCRA a un día o a siete días de plazo a una tasa prefijada) más las Letras de Liquidez del BCRA (Leliq) a siete días de plazo a una tasa de interés pactada en licitación. Ambos son instrumentos del Central para regular la liquidez del mercado financiero, o sea, el nivel de la base monetaria. Muchos creen que el tema de la “bomba” de las Leliq ya se resolvió como ocurrió con el de las Lebac (Letras del BCRA). Sin embargo, el tema se ha potenciado. No solo porque el stock de las Leliq se estacionó en los $780.000 millones, sino porque el stock de Pases Pasivos se ha casi duplicado desde el cambio de gobierno. En la actualidad los Pases Pasivos suman más de $760.000 millones. Y hay que señalar que de este total los Fondos Comunes de Inversión (FCI) ya tienen menos de $80.000 millones. Es que se han ido anticipando a la nueva regulación del BCRA que ya no les deja tener Pases Pasivos a partir de febrero. No hay que olvidar que los FCI sufrieron el “reperfilamiento” de las Letes y terminaron colocando o “estacionando” parte de esa liquidez en Pases bajo el beneplácito del BCRA. Ahora el ente monetario comandado por Miguel Pesce eliminó esa prerrogativa y los FCI están recogiendo el barrilete. La movida debería beneficiar a los bancos a dónde deberían ir los FCI a colocar sus excedentes y estos se los volverían a llevar al BCRA. O bien el Tesoro les coloque otro instrumento que les de la liquidez que buscan las gestoras. Sino al fin de cuentas este “loop” termina conspirando con la baja de las tasas de interés que tanto pregona el Gobierno. Ya que en lugar de colocar directamente en el BCRA, los FCI buscarán tasa en los bancos y estos le pedirán a cambio una tasa mayor al ente monetario. Pero esto es harina de otro costal, o más bien, otro tema a mirar. Lo cierto es que semejante stock de deuda remunerada del BCRA no solo complica las metas monetarias sino también las inflacionarias. Dado que el costo financiero es insoslayablemente elevado. Basta con señalar que a lo largo del 2019 el Central pagó cerca de $693.000 millones en concepto de intereses. Hoy al haber “paseficado” el stock de deuda se potencia el costo de semejante endeudamiento. Porque los Pases Pasivos están pactados a un día de plazo. O sea, cada veinticuatro horas el stock de Pases crece hoy a una tasa anual del 45,5%. Mientras que el de las Leliq lo hace cada siete días al 52% anual. Un simple cálculo permite arriesgar que de no mediar ningún cambio sustancial el BCRA volverá este año a incurrir en un alto gasto en intereses superior al del 2019. De esta manera el mismo “pecado” del gobierno de Cambiemos volvería repetirse. En momentos de impuestazos y de reclamos por el nivel de pobreza ¿cómo le harán digerir a la gente que se gasten más de $700.000 millones en intereses por la deuda del BCRA? Porque si se estima una inflación anual no menor al 40%, la tasa que le remunerarán a los bancos por las Leliq y Pases deberá ser positiva. Sin duda será un desafío. Es seguro que la nueva cúpula del BCRA y del Palacio de Hacienda “juegan” a favor de que la demanda de dinero retome un circulo virtuoso de la mano de la recuperación de la economía, y con ello se reactive el crédito. Hoy esto está por verse. Ya que está todo contaminado por el accionar del cepo. Lo cierto es que el primer test será lo que acontezca a partir de las próximas semanas. El stock de Pases y Leliq es hoy además equivalente al 56% de las reservas internacionales del BCRA. Lo cual refleja la dimensión de las cifras en cuestión. No será sencillo desarmar este embrollo sino reacciona la economía. Se necesitará algo más que optimismo y confianza.
- (Cronista) Se agudiza la crisis petrolera en Neuquén El gobernador Omar Gutiérrez se reunió con el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y con el titular de YPF, Guillermo Nielsen, para transmitirle su preocupación por los despidos en Vaca Muerta. a crisis desatada en Vaca Muerta por el salto del dólar y del riesgo país, así como por el congelamiento de los combustibles en agosto pasado, se profundizó en el arranque del año y amenaza con profundizarse por el desplome de la inversión.El gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, le planteó al ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, Matías Kulfas, la dificil situación por la que atraviesa la industria petrolera en esa provincia, que tiene como epicentro al reservorio no convencional antes mencionado, uno de los mas importantes del mundo y que se espera que sea el motor del despegue económico argentino. Gutiérrez también le llevó sus inquietudes al presidente de YPF, Guillermo Nielsen, ya que ascienden a 2000 los trabajadores despedidos o suspendidos por las empresas que ven con preocupación la falta de incentivos para la inversiones a partir del congelamiento de los combustibles determinado por el ex presidente Mauricio Macri. También las pymes de capitales locales que prestan servicios a las grandes operadores se ven seriamente afectadas resintiendo fuertemente la economía regional. Las inversiones en Vaca Muerta desde el gobierno de Cristina Kirchner hasta el momento ascienden a los u$s 27.000 millones -más de 5000 solo el año pasado- y es la base de la economía provincial al punto que todo gira en torno a la distribución de regalías provinciales, especialmente hacia los municipios y hacia el empleo indirecto por la prestación de servicios a monotributistas y microempresas que son proveedores del Estado provincial. El reclamo del mandatario patagónico estuvo acompañado por la amenaza del gremio petrolero de llegar a un paro total de actividades aunque su secretario general, el ex senador Guillermo Pereyra condicionó la medida a los avances en las negociaciones con el Gobierno nacional. El gremialista anunció que este viernes 17 se reunirá en Buenos Aires con Kulfas y el ministro de Trabajo, Claudio Moroni. Ayer el sindicato inició asambleas en los distintos yacimientos que componen la denominada Cuenca Neuquina y anticipò una asamblea general de delegados para el pròximo 23 de enero. También Gutierrez trató de calmar las aguas al sostener a un diario local que se encuentra en vigencia la conciliación obligatoria dispuesta por la cartera laboral nacional. «Reitero la voluntad del gobierno (provincial) que es con la gente adentro. No puede haber lugar para un solo despido porque el Gobierno nacional ha pedido un tiempo, es un nuevo signo político que empieza a gobernar y ha ratificado con todas las letras la importancia de la articulación público privada para generar el desarrollo de las economías regionales», le dijo el mandatario al diario Río Negro. En paralelo el mandatario patagónico relativizó las declaraciones de Alberto Fernández sobre el enamoramiento de la Argentina con Vaca Muerta, dejando de lado la exploraciòn de nuevos yacimientos convencionales cuyo costo de explotación es menor. «En el diálogo que yo he tenido con el Presidente ratificó la importancia estructural y estratégica que le asigna al desarrollo de Vaca Muerta», añadió. Por su parte Pereyra, en un tono más belicoso, anticipó que «se parará toda la actividad en Vaca Muerta si hay despidos». En la localidad rionegrina de Catriel y ante cientos de afiliados, advirtió que «no habrá paz social con los trabajadores en la calle» e instó a las empresas a tomar nota porque, a su criterio, «no mostraron voluntad de resolver el conflicto», relativizando responsabilidades del actual Gobierno nacional.
- (Cronista) Las provincias deben pagar otros u$s 1200 millones este año Exceptuando Buenos Aires, el resto debe pagar más de u$s 3000 millones hasta 2021. El próximo vencimiento es de la Ciudad. Chubut, Neuquén y Río Negro están en la mira y Córdoba afronta u$s 725 millones en 2020. Luego de que la provincia de Buenos Aires declarara que no podrá hacer frente a un vencimiento de deuda por u$s 275 millones el 26 de enero, se encendieron las alarmas por las deudas de otras provincias que pueden llegar a tener complicado el pago o la refinanciación en los próximos meses. Sin contar la jurisdicción que gobierna Axel Kicillof (poco más de u$s 2700 millones), el resto debe afrontar en este 2020 vencimientos de bonos por u$s 1256 millones, según un reciente informe de la consultora Elypsis. La Ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Neuquén, Chubut, Río Negro y Mendoza abarcan el 81% de ellos: son u$s 1012 millones, de los cuales apenas u$s 317 millones están nominados en moneda local. De estas provincias, la que está en peor situación es Chubut: necesita u$s 112 millones de los u$s 777 millones que emitió, con un perfil de vencimientos crecientes hasta 2023 y una gradual disminución hasta 2026. La ciudad que administra Horacio Rodríguez Larreta y Río Negro concentran en este año el 18% y 16% del total sus vencimientos, respectivamente. Ciudad de Buenos Aires pagaría unos u$s 459 millones; Córdoba, u$s 159 millones; Neuquén, u$s 130 millones; y Río Negro, u$s 77 millones. En febrero, la Ciudad enfrentará el vencimiento más abultado, por u$s 165 millones, según el calendario de Economía y Regiones (E&R). «Las provincias con pagos relevantes en el corto plazo tendrán un problema para hacerse de recursos fiscales y de divisas suficientes para afrontarlos, sin poder esperar una ayuda significativa de parte del Estado nacional hasta que éste no clarifique el horizonte de su propia renegociación de deuda. La provincia y la Ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Neuquén y Chubut son las que mayor monto de ayuda requerirían para evitar un evento crediticio en 2020, aunque también son las que cuentan con mayor flujo de ingresos en general, incluyendo regalías hidrocarburíferas en las patagónicas», había advertido Elypsis semanas atrás. Los aportes de la administración nacional se vuelven, entonces, imprescindibles para los gobiernos regionales. De hecho, Nación autorizó la semana pasada la asistencia financiera por hasta $ 5650 millones a Chaco, Chubut, Tucumán, Río Negro y Santa Cruz, para aplacar las demandas internas en esas provincias, asociadas principalmente al pago de salarios estatales. Ya hacia 2021, las provincias afrontarán vencimientos por unos u$s 1900 millones y allí se empezará a complicar Córdoba, que debe pagar o refinanciar u$s 725 millones, de acuerdo a E&R. En adelante, Jujuy, La Rioja y Santa Fe, «si bien tienen vencimientos moderados en 2020, deben solventar además sus déficits primarios (en caso de no mejorarlos)», indica Elypsis. La provincia gobernada por Gerardo Morales tomó préstamos con bancos chinos para financiar tres parques solares en la Puna, que todavía no pudieron entregar energía al sistema y generar los ingresos necesarios para repagar el crédito. En un trabajo titulado «¿Pueden las provincias argentinas resistir un posible default soberano en 2020?», la calificadora de riesgos crediticios Standard & Poor’s (S&P) señaló que veían el perfil de amortización de la deuda de los gobiernos locales y regionales (GLR) en el corto plazo «bajo menos presión que en años anteriores» y que «el pago de la deuda no será oneroso en 2020», por lo que consideraron que está «en un nivel manejable». «La situación fiscal de los gobiernos provinciales ha mejorado en los últimos años. Aun así, los desafíos que se avecinan son sustanciales, y las presiones continuarán sobre el ingreso y el gasto para todos. Por lo tanto, su voluntad y capacidad para evitar desequilibrios fiscales significativos y una mayor erosión de la liquidez influirán en la calidad crediticia en 2020», cerró S&P.
- (Cronista) Incluyen en las extraordinarias la renegociación de la deuda con el FMI Luego de varias reuniones en la Rosada entre Alberto Fernández, Cafiero, Massa y Máximo Kirchner, se definió que se sume el tema al debate, junto con el consenso fiscal y las jubilaciones de privilegio. Se busca sesionar el próximo 29 de enero. Alberto Fernández, Santiago Cafiero, Sergio Massa y Máximo Kirchner mantuvieron distintas reuniones hoy en Casa Rosada y definieron el temario que presentarán en las sesiones extraordinarias del Congreso, que finalmente, intentarán, será el 29 de este mes A la agenda que se venía trabajando en estos días, se añadirá el debate del proyecto de renegociación de la deuda con el FMI, según pudo saber El Cronista. Hasta el momento, en el Gobienro no quieren dar más precisiones sobre qué incluiría semejante proyecto. En la oposición piensan que se trataría de una estrategia para que Cambiemos se comprometa a apoyar la renegociación con el FMI, luego de que Macri haya firmado un préstamo por u$s 57 mil millones sin consulta previa al Congreso. Otra posibilidad sería la de mostrar una reestructuración de deuda doméstica antes de sentarse a negociar con acreedores externos. Esta es una salida que plantean economistas como Lee Buchheit, Guillaume Chabert, Chanda DeLong y Jeromin Zettelmeyer en un reciente paper publicado en el Peterson Institute for International Economics. De hecho, a meses de dejar el Gobierno, Mauricio Macri envió un proyecto de ley para permitir la modificación voluntaria de los términos y condiciones de los títulos de deuda pública regidos por ley argentina, mediante la obtención del consentimiento de ciertas mayorías de tenedores. La suspensión del consenso fiscal y la discusión sobre las jubilaciones privilegio de jueces y diplomáticos son algunos de los temas que se tratarán en extraordinarias. Ahora, una posible renegociación de la deuda con el Fondo, se suma al listado, confirmaron fuentes cercanos a los funcionarios que mantuvieron los encuentros hoy. «La fecha depende de que salgan rápido del (Poder) Ejecutivo los proyectos de ley que se tratarán, que alcance el tiempo para que las comisiones trabajen y que se llegue a tener dictamen», explicaron las fuentes. La intención de llevar la sesión a la semana del 29 de enero está, pero «dependerá de los tiempos, ya que se está trabajando a contrareloj».
1. Aranceles
Bloomberg advertía que tarifas existentes de EE.UU. sobre 360.000 millones de dólares de productos importados desde China se mantendrán hasta después de las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre, y cualquier medida para reducir las mismas depende del cumplimiento del Gobierno de Pekín del acuerdo comercial de Fase 1. Algo que fue ratificado por el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, que afirmó que los aranceles se mantendrán hasta que se complete el acuerdo comercial de Fase 2. “De forma separada, tanto Mnuchin como el representante de Comercio de EEUU, Robert Lightizer, lanzaron un comunicado conjunto destacando que el único componente no público del acuerdo comercial es un anexo confidencial con detalles sobre los compromisos de compras por parte de China. Además, añadieron que no hay un acuerdo sobre una reducción futura de tarifas”, destacan en Link Securities.
2. Propiedad intelectual y tecnología The New York Times, de acuerdo a fuentes conocedoras del asunto, informó que “el acuerdo comercial de Fase 1 entre EE.UU. y China incluye compromisos del gigante asiático para restringir las prácticas de las que se quejan las compañías norteamericanas al ponerles en desventaja y obligarles a entregar propiedad intelectual valiosa a las compañías chinas. Bajo el acuerdo, China ha prometido castigar a las empresas que infrinjan el acuerdo y roben secretos comerciales corporativos”, se hacen eco desde Link Securities. “Además, China también deberá abstenerse de inducir a sus empresas a obtener tecnologías extranjeras delicadas mediante adquisiciones, incluyendo frenar las compras de las compañías estatales que puedan dañar los intereses americanos. El acuerdo también trata las quejas de las compañías estadounidenses sobre la entrega de tecnología como una condición para realizar negocios en China”, añaden estos expertos.
3. Compras por parte de China Tal como publicábamos ayer, en el acuerdo también estaría incluido que China se compromete a adquirir 200.000 millones de dólares de bienes estadounidenses en un periodo de dos años. Este volumen incluye 75.000 millones en bienes manufactureros, 50.000 millones en bienes energéticos, 40.000 millones en bienes agrícolas y 35.000-40.000 millones en servicios.
4. Posibles medidas de castigo “El asesor comercial de la Casa Blanca, Peter Navarro, dijo que el acuerdo también incluye fuertes mecanismos de cumplimiento, destacando que EE.UU. podría imponer tarifas de forma unilateral si China incumple alguno de sus compromisos”, comentan en Link Securities, que destaca el escepticismo en el mercado sobre la capacidad de ambos países de alcanzar un acuerdo comercial de Fase 2 más amplio. “Los americanos se guardan la baza de comprobar hasta las elecciones de noviembre el grado de cumplimiento chino de sus compromisos. Mantienen las tasas vigentes hasta comprobar en esas fechas. Las exigencias americanas para importar tal cantidad de productos parecen un poco excesivas”, coinciden en Renta Markets.
5. Huawei continúa en el punto de mira “Hoy se ha sabido que EE.UU. está preparando nuevas medidas para entorpecer las operaciones de Huawei. Volvemos a la guerra comercial”, señala José Luis Cárpatos, CEO de Serenity Masrkets. Según Reuters, el gobierno de Estados Unidos podría anunciar en breve una medida que ampliaría sus poderes para bloquear los envíos de productos fabricados en el extranjero a Huawei.
Dudas con respecto a la Fase 2
“Ahora habrá que iniciar negociaciones de una segunda fase que se antoja bastante más complicada, al tratar temas más delicados (subvenciones públicas a empresas chinas, protección de la propiedad intelectual, final de cesiones de tecnología o una mayor apertura a la inversión extranjera), lo que no descartamos que imprima volatilidad al mercado”, apuntan en Renta 4 (MC:RTA4). “Con un acuerdo así la economía no se va a recuperar ni de lejos, por muchos brotes verdes que nos estén vendiendo”, concluye Cárpatos. Sin embargo, otros analistas se muestran más positivos. “Desconocemos si la Fase 1 del acuerdo comercial va a tener el impacto que han estado esperando los inversores en el crecimiento económico mundial. Lo que sí pensamos es que, por muy limitado que sea el mismo, ha supuesto un punto de inflexión en un conflicto comercial que se estaba eternizando y que amenazaba con penalizar la economía global”, explican en Link Securities. “No obstante, entendemos el escepticismo de muchos inversores ya que, tras la firma de esta ‘primera fase’, las posturas de ambos países en muchos temas, no sólo comerciales, siguen muy distantes y no se van a resolver en años. Los mercados de valores deberán adaptarse a este escenario, algo que, por otra parte, no es una novedad”, concluyen estos analistas.
Si no hay sorpresa de última hora, este miércoles Estados Unidos y China firmarán su acuerdo comercial de Fase 1 en una ceremonia a la que la Administración Trump ya ha enviado más de 200 invitaciones.
Ya ayer ambos gigantes sorprendían con un guiño mutuo antes de la firma: Estados Unidos anunciaba que retiraría a China su designación como manipulador de divisas y, por su parte, el gigante asiático informó de un amplio compromiso extra en volumen de compras de productos y servicios estadounidenses.
No obstante, hay dos factores que siguen preocupando al mercado: los aranceles y el volumen de compras agrícolas, que no están definidos. Está previsto que hoy, con la firma del acuerdo, se haga público el documento.
