(Cronista) Provincias opositoras reclaman libertad para sus negociaciones El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, buscó el apoyo de sus pares ante Nación. No lograrían incluir la deuda provincial en el proyecto original de reestructuración. ambiemos intentó ganar cierta autonomía de la Casa Rosada al menos en los distritos opositores. Los mandatarios de este espacio reclamaron al presidente de Diputados, Sergio Massa; al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y al ministro del Interior, Eduardo de Pedro, que el proyecto de restructuración de la deuda que hoy se debatirá en la Cámara baja incluya artículos para dar libertad a las provincias al momento de renegociar sus deudas. «La idea es incluir las deudas provinciales en el proyecto de ley», comentó la futura líder del PRO, Patricia Bullrich, en relación a la norma de Restauración de la Sostenibilidad de la Deuda. Tras horas de discusión en el Congreso, en Cambiemos comentaban que se evalúa la posibilidad de otorgar «más autonomía» a las provincias para reestructurar las deudas provinciales emitidas en dólares. Pero no lograron que incluyan este punto en el proyecto original. «Vamos a votar en la sesión un proyecto de resolución y vamos a crear una mesa de trabajo entre el Poder Ejecutivo y el bloque mayoritario de la oposición para analizar la sustentabilidad de las deudas de las provincias», comunicó el diputado Mario Negri. A las 19 horas, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, el titular de la UCR, Alfredo Cornejo, los diputados Maximiliano Ferraro, Negri, Silvia Lospennato y Álvaro González se reunieron con referentes del oficialismo. Por el oficialismo se encontraban Massa, el ministro De Pedro, Cafiero, y el líder del Frente de Todos en Diputados, Máximo Kirchner. Además del vencimiento de deuda, Cambiemos buscaba facilidades para que los distritos subnacionales salieran al mercado, ya que al igual que en la renegociación de sus deudas interviene la Nación. Por su parte, la Casa Rosada se anotaba este martes el apoyo de la principal fuerza de oposición en el Senado para la votación del pliego de Daniel Rafecas como futuro Procurador General. Los mandatarios de Cambiemos buscan además que los vencimientos de deuda no caigan durante sus mandatos. Por eso piden postergar hasta diciembre de 2024 vencimientos de capital e intereses que mantengan con Nación. De fondo, la discusión muestra también otras preocupaciones. Morales sería quien pidió apoyo a sus pares. Hay cierto temor en Jujuy, de que sea discriminada por la Rosada. El senador Mario Fiad advirtió: «La Nación no ha girado a la provincia de Jujuy el monto de 222 millones de pesos en concepto de Fondo Especial del Tabaco». Para el jujeño, presionan a Morales por la detención de Milagro Sala. Las sospechas cubren también a la Ciudad de Buenos Aires, a la que la Nación pretende recortar fondos coparticipables. Por eso ayer Larreta dedicó casi todo el día a las reuniones con sus pares, algo que resulta extraño en el jefe de gobierno porteño. A su vez, la UCR quiere incluir otra inquietud respecto al proyecto de reestructuración de deuda. Varios diputados se reunieron con representantes de las Cajas Previsionales de Profesionales. «La reestructuración de deuda genera un impacto enorme sobre el sistema de seguridad social, a partir de la tenencia de títulos públicos en poder de la ANSeS y las cajas previsionales y profesionales provinciales», señaló Alejandro Cacace. El legislador agregó que «existe el antecedente en el reperfilamiento de 2019 de que estas instituciones fueran excluidas de la reestructuración, en virtud de estar establecidas sus inversiones por la propias leyes que regulan su funcionamiento». Por su parte, el diputado santafesino Juan Martín agregó: «el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) también se encuentra compuesto por bonos que podrían sufrir una quita importante. Se ponen así en riesgo las jubilaciones de nuestros adultos mayores».
(Cronista) Tras el viaje a Nueva York, la renegociación de la deuda sigue en el Vaticano El ministro de Economía se encontrará con la búlgara Kristalina Georgieva en un seminario gestado por el Papa Francisco. Tras el encuentro que mantuvo ayer el ministro de Economía, Martín Guzmán, con las autoridades del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Nueva York, Estados Unidos, fuentes oficiales confirmaron la presencia del funcionario el 5 de febrero en el Vaticano, en donde se reunirá con la directora gerente del organismo internacional, la búlgara Kristalina Georgieva. En la reunión «Nuevas Formas de Fraternidad Solidaria de Inclusión, Integración e Innovación», que organiza la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales, Guzmán retomará con Georgieva la conversación por la renegociación de la deuda externa. El cara a cara del próximo miércoles lo gestó el Papa Francisco y tendrá también como partícipe al Premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, maestro de Guzmán en la Universidad de Columbia. Guzmán se presentará a las 15.50 hora local (las 11.50 de Argentina) en el segundo panel del día, titulado «Transformando las reglas de la arquitectura financiera internacional: estabilidad económica y financiera», junto con otros ministros de Economía y Finanzas de la región (México, Colombia, Paraguay y El Salvador). Previamente, a las 9.15 hora local (las 5.15 de Argentina), hablará el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, mano derecha del presidente, Alberto Fernández, quien visitará el Vaticano este viernes 31. La cena en la Villa Pía (Casina Pio IV) está pactada para las 19.10, después de los discursos de Stiglitz y Georgieva.
(Cronista) Una misión del FMI vendrá a Buenos Aires en febrero Lo informó el vocero del organismo, Gerry Rice, en un comunicado posterior a la reunión del ministro Martín Guzmán con el director para la Argentina, Luis Cubeddu, en Nueva York. El Fondo Monetario Internacional (FMI) anticipó hoy que en febrero llegará a la Argentina una misión para «seguir intercambiando visiones sobre los planes macroeconómicos y la sostenibilidad de la deuda». El vocero del Fondo, Gerry Rice, indicó que en la reunión mantenida este martes entre el ministro de Economía, Martín Guzmán, y funcionarios del organismo «ambas partes reiteraron su disposición a continuar el diálogo en las próximas semanas». «Incluso el 5 de febrero, cuando la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, se reúna con el ministro en los márgenes de un seminario organizado por el Vaticano», puntualizó. En ese escenario, adelantó que «se espera una visita de la Misión del FMI a la República Argentina en febrero para seguir intercambiando visiones sobre los planes macroeconómicos y la sostenibilidad de la deuda».En un comunicado, aseguró que el encuentro del titular de la cartera económica con la directora Adjunta del Departamento del hemisferio occidental del organismo, Julie Kozack, y el jefe de Misión para la Argentina, Luis Cubeddu, fue «muy productivo». «El intercambio fue una oportunidad para continuar el diálogo en curso, escuchar del ministro los planes económicos de las autoridades argentinas e intercambiar visiones sobre el análisis de la sostenibilidad de la deuda», destacó el vocero del organismo. La reunión de este martes en Nueva York se extendió por casi tres horas y también participó el representante del Cono Sur ante el board del organismo de crédito multilateral, Sergio Chodos. Guzmán pudo así exponer los lineamientos generales del plan económico para superar la crisis y también dio a conocer detalles de las medidas adoptadas hasta el momento. Al finalizar el encuentro, el titular de la cartera económica coincidió en que fue «muy productivo» y afirmó que se continúa «dando pasos» dado que «es parte de un proceso para la reforma integral»
(Cronista) Con inversores más pesimistas, el mercado marca la cancha al Gobierno de cara a la reestructuración Las paridades de los bonos volvieron a deteriorarse y con ellas las expectativas de que la gestión de Alberto logre una negociación amigable. Tras el empeoramiento de las expectativas, las chances de ver mayores quitas de capital, de cupones y extensión de plazos toman nuevamente mayor protagonismo. Ee la mano de la caída en la renta fija local, las paridades de los bonos argentinos se deterioraron recientemente. A los precios actuales, el mercado vuelve a ponerse más negativo sobre los escenarios de reestructuración de deuda y en el que pondera quitas de capital y de cupones más agresivos respecto de lo que se evidenciaba a comienzo de año. Los bonos de distintos tramos de la curva se vieron afectados y sus paridades regresaron a niveles de 45% en promedio. El Global 2021 cayó a 50% de paridad contra los 55% a comienzo de año. El Bonar 26 paso de 53% a 43% de paridad mientras que el Centenario paso de 51% a 43%. En la parte ley local, el Bonar 24 se mantuvo con paridades de 47% respecto de comienzo de año, aunque la paridad del DICA cayó desde 52% a 46%. Todo ello habla de un contexto de deterioro de los bonos que anticipa una potencial reestructuración más agresiva. Los analistas de Consultatio señalar on que las probabilidades de ver una quita más agresiva subieron en el margen recientemente. “Si bien ni el proyecto de ley ni la conferencia de Guzmán hicieron referencia a las condiciones de la propuesta, la novedad de la semana al respecto pasó por las palabras de Stiglitz en Davos, quien dijo que ‘no puedo concebir ningún modelo razonable que no diga que tiene que haber recortes significativos; sería una fantasía pensar lo contrario’. La realidad es que la probabilidad de una quita más agresiva subió en el margen”, afirmaron. Por su parte, un operador de bonos de un banco local aseguro que actualmente los bonos descuentan un escenario de quitas que van desde el 20% al 35%, lo que significa una reestructuración agresiva, acercándose a las expectativas negativas que se tenías hace un par de meses atrás. “Con paridades de entre 45% estimamos que el mercado espera una reestructuración agresiva. Esto puede implicar un contexto en el que la quita de capital sea de entre 20% al 35% y con extensión de plazos de pago de cupones y amortizaciones de capital por lo menos dos años. También esperamos quitas en los cupones de intereses. Por la caída reciente de los bonos espero que el sesgo sea más agresivo respecto de lo que se esperaba hace a comienzo de año”, sentenció el operador. El mercado le marca la cancha al Gobierno Cada vez que un país se enfrenta a situaciones de estrés financiero, los bonos que dicho país emitió dejan de ser analizados en base a su tasa de interés y comienzan a ser evaluados en función de sus paridades. Estas suelen reflejar el ticket de entrada hacia el proceso de reestructuración de la deuda y así, el precio de los bonos refleja la expectativa de cuánto es lo que se va a recuperar, una vez que Argentina haya finalizado el proceso de reestructuración y canje de deuda. De esta manera, la paridad de los bonos le marca la cancha al Gobierno para poder determinar que clase de reestructuración se puede llegar a esperar hacia adelante. Al gobierno no le conviene alejarse demasiado de dicha expectativa para que, de esa manera, el éxito en la reestructuración sea mas probable. En términos generales, una reestructuración liviana podría implicar un riesgo país en niveles de 600 puntos, junto con un alargamiento de plazos de 10 años y quita de capital de 20%. Una reestructuración dura podría implicar un riesgo país de 500 puntos, con alargamiento a 15 años de plazo y quitas de hasta el 40%. En la reestructuración de la deuda que llevó a cabo Argentina en el año 2005 fue sumamente agresivo, finalizando con un riesgo país en 400 puntos, una extensión de plazos a 30 años y quitas del 66%. El debate entre analistas y operadores es cual puede llegar a ser el nivel de quita que podrán enfrentarlos bonos en la actual reestructuración dada las paridades con las que vienen operando actualmente los bonos locales. Según detallan desde la mesa de operaciones de Grupo SBS, los niveles de paridades actuales se condicen con una restructuración comparable a la que llevó adelante Ecuador en 1999. “En la reestructuración de Ecuador en 1999 se incluyeron una quita de capital, alargamiento de plazos y recorte en cupones, lo que aún nos parece demasiado agresiva para la situación actual de deuda argentina”, afirmaron desde Grupo SBS. Por su parte, Nicolas Max, director de Asset Management de Criteria explicó que hay distintas formas de medir una quita y cuál sería el valor de recupero total del nuevo bono. “La manera más simple es medirlo contra el valor nominal del bono. Dado que la curva ley Nueva York está cotizando en el en niveles de paridad del 44%, estamos hablando de una quita de en términos de valor presente del orden del 56% sobre un bono que en su momento se emitió a la par. Ello no implica necesariamente una quita de capital, sino una combinación que podría incluir quita de capital, diferimientos de plazos y recorte en los cupones”, dijo Max.
(Ambito) Deuda: para extranjeros negociación no tiene mucho margen de maniobra. Se entiende que las partes aún no muestren sus cartas. Por lo menos hasta que se sienten, formalmente, a negociar. Sin embargo, los modelos de sustentabilidad (DSA) alertan sobre el reducido sendero sobre el que deberán transitar los negociadores. Comenzó a pleno el póker de la reestructuración de la deuda argentina en los mercados mundiales y el debate empieza a escalar. En las próximas semanas se pondrá más candente, pero más allá de los intereses contrapuestos de bonistas y del Gobierno argentino, ambas partes parecen reconocer que debe encontrar una solución urgente porque el calendario de vencimientos no da tregua y la posición de reservas líquidas serían muy bajas en el cuarto trimestre. Sin embargo, los analistas vislumbran negociaciones prolongadas. Al respecto, ayer el International Institute of Finance (IIF), task force de los grandes bancos internacionales, difundió un informe sobre el “hechizo” de los controles de capitales en Argentina y advierte que sólo le dan un respiro temporal en ausencia de desembolsos del FMI y con el problema de la deuda sin resolver. “Mientras el crecimiento siga deprimido, es probable que haya un superávit comercial que el BCRA pueda capturar mediante su intervención. En este entorno, la liquidez estará disponible para pagar la deuda en dólares por un período. Como lo demuestra la experiencia de 2011-15, en los próximos años es poco probable que los controles de capital por sí solos ofrezcan un modelo de financiamiento externo sostenible. El capital nacional y extranjero sólo retornará bajo un conjunto completo de políticas coherentes”, concluye. Con relación a los escenarios de sostenibilidad de la deuda (DSA), diseñados por unos y otros, con miras a la renegociación, es obvio que están contaminados según su artesano. Pero lo cierto es que hay cierto consenso en que sin quita de capital, sólo habrá una transición hasta la próxima crisis, que ya la proyectan para 2024. O sea, de este atolladero no se sale solo con reperfilar. De modo que el margen de maniobra, para ambas partes, se torna bastante acotado. Hoy los probables escenarios de negociación, con o sin quita, están casi 50/50, ya que el caso “óptimo”, de bajísima probabilidad, supondría un gran esfuerzo fiscal, sin quita de deuda, y que todo sale “a las mil maravillas”. Por ende, todo se resume básicamente a una puja entre quita o no. Con relación al FMI, no hay consenso, podría no tener tanta influencia en el proceso ya que Argentina recién necesita el “rollover” de la deuda en 2021 y de esta manera evitaría atarse a un programa delineado por el organismo, que seguramente implicaría una quita de capital, además de un ajuste fiscal y reformas. Al respecto, tanto analistas como bonistas son muy incrédulos sobre el rol del FMI porque señalan que los últimos DSA para el caso argentino fueron ambiguos sobre la “sostenibilidad” de la deuda. Porque indicaban cierta sustentabilidad, pero bajo una amplia zona gris de riesgos. Por ello creen que el FMI podría considerar necesaria una quita de la deuda dado que su modelo DSA proyectaría la deuda por encima de un área gris de sostenibilidad (60%-80% del PBI, por encima de Ucrania cuando acordó un recorte de 20% en 2015). Con este panorama resulta interesante definir las cuestiones claves, a favor y en contra, de este juego de reestructuración de la deuda y que marcarán las posiciones iniciales en la negociación. Para ello recurrimos a un resumen elaborado por economistas de Oxford Economics donde fijan cuatro variables: quita, alto superávit fiscal, control de capitales y programa con el FMI; y las cruzan con el Fondo, el Gobierno argentino (GA) y los bonistas (B). Quita: el FMI dirá que “sí, restaura la sostenibilidad, pero puede comprometer. Argumentará que el BCRA necesita ser recapitalizado”; el GA, “a favor sujeto a gran temor por litigios”; y B, “fuertemente en contra, argumentará para excluir la deuda en poder del BCRA y los bancos. Alto superávit fiscal: FMI, “a favor, sería una capitulación permitir un déficit dado que a Macri no se lo dieron”; GA, “se resistirá fuertemente, políticamente muy difícil”; y B, “a favor, ¿por qué deberían tomar otra quita si el esfuerzo fiscal es tímido?”. Controles de capital: FMI ,“en contra además de ganar tiempo para el ajuste a políticas macro más equilibradas”; GA, “a favor: crucial para mantenerse a flote”; y B, “a favor: proporciona un mayor alivio de la deuda”. Programa del Fondo: FMI, “sí, lo antes posible”; GA, “en contra, pero necesitará uno en 2021 para renovar la deuda del FMI”; y B, “ven al FMI irritante a corto plazo, pero como un ayudante para la adhesión fiscal”. Sobre esta base pergeñaron los escenarios DSA y nos concentramos en caso base y en el negativo. El “base” (probabilidad 45%) es para una quita del 20% y la reducción de cupones a 5%, y un pequeño superávit fiscal primario 2020-2025. La deuda se ameseta en poco más de 70% del PBI, pero la continúa la dependencia del BCRA. En el escenario más negativo para los bonistas (probabilidad 40%) el Gobierno argentino impone una quita del 30%, pero luego se tambalea en la heterodoxia y la deuda retoma un camino insostenible, que llega al 88% del PBI en 2025. “Nuestro análisis de la sostenibilidad de la deuda también muestra cómo las desviaciones de la política económica podrían socavar la sostenibilidad de la deuda de Argentina, con independencia de la reestructuración de las negociaciones”, advierten los economistas de Oxford y explican que “en este contexto, es crucial comprender cómo los DSA rigurosos pueden establecer límites de negociación y cómo se pueden manipular para presentar el rango de escenarios que brindan un apoyo conveniente a cada posición de negociación”.
(Ambito) Apple obtuvo ganancias récord por u$s22.000 millones impulsada por venta de iPhone. La tecnológica superó las expectativas de Wall Street, ubicadas en u$s88.500 millones. La incertidumbre que genera el coronavirus en China podría afectar el resultado de marzo, aseguró Cook. La compañía tecnológica Apple dio a conocer este martes un balance histórico, en el cual reportó ingresos por u$s91.800 millones durante el trimestre que finalizó el 28 de diciembre debido a las compras navideñas superiores a las expectativas de Wall Street. El beneficio neto llegó al récord de u$s22.000 millones de dólares. Fue debido a un impulso de las ventas de iPhone por primera vez en un año y la creciente demanda por accesorios, como los auriculares inalámbricos AirPods. La firma conducida por Tim Cook reportó u$s91.800 millones en ingresos para el trimestre que finalizó el 28 de diciembre, en comparación con las estimaciones de analistas de u$s88.500 millones, según datos de IBES de Refinitiv. También informó ganancias por acción de 4,99 dólares frente a las estimaciones de analistas de 4,55 dólares por papel. Pero a pesar de que los ejecutivos de Apple establecieron un nuevo objetivo de 600 millones de suscriptores pagados en su plataforma para fines del año calendario 2020, el negocio de servicios de la compañía, que incluye su nuevo servicio de «streaming» Apple TV+, incumplió las metas de Wall Street. La cifra total de dispositivos instalados de Apple creció en 100 millones a más de 1.500 millones durante el año pasado. Apple pronosticó ingresos para el trimestre que finaliza en marzo por encima de las expectativas de Wall Street. Sin embargo, su presidente ejecutivo, Tim Cook, dijo a Reuters que la compañía está usando un rango de predicción más amplio de lo normal debido a la incertidumbre generada por el brote de coronavirus en China, donde se encuentran muchos de los proveedores de Apple. Cook dijo que los ejecutivos de Apple planean discutir más detalles sobre cómo el virus afectará la cadena de suministros de la empresa en un teleconferencia con los inversores. Las acciones de Apple subieron un 2,8% a 326,15 dólares en las operaciones posteriores al cierre del mercado después de que se anunciaron los resultados. Asimismo, la compañía logró revertir su caída en la participación del mercado chino en el cuarto trimestre al cerrar en un 11,8%. Según el informe realizado por la consultora Canalys, se trata de la más alta participación Apple en ocho trimestres, debido a un buen anclaje del iPhone 11 a raíz de su competitivo precio.